En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.

19 de octubre de 2015

Decir No...

Tú sabrás lo que haces...
Allá tú...
Si me quieres no harás eso...
Si me amas lo harás...
Después de todo lo que hago por ti...

Chantajéame tú si puedes... Tú que eres débil e inseguro... Pero no te tengo miedo. Soy pasiva a tus palabras y a tus falsas intenciones. ¿Qué harás si no te hago caso, si no acepto tus condiciones, si te dejo que me manipules? Nada. No harás nada.

¿Vas a dejarme? Eres libre de hacer lo que quieras, como libre soy yo. Y si eso hace que me dejes... será, tal vez, lo mejor...

¿Crees que me voy a sentir culpable? ¿Crees que me voy a sentir mala por no contemplarte o por no hacerte caso? ¿Quién te crees que eres? No soy mejor que tú pero no me harás sentir peor.
¿Qué no quieres vivir si no? ¡Qué tonterías dices! No me das pena. Eres tan dueño de vivir tu vida como yo la mía. No voy a estar contigo por pena. Si hiciera eso, ¿sabes quién chantajearía? Yo. Y tú, el manipulado.

Sí, aprovechas que me conoces bien y sabes mis puntos flacos. Pero yo también conozco los tuyos y no te confundas. No trates de hacerme ver que me necesitas tanto, que mis consejos son tan importantes pues haces, al final, lo que quieres... No deformes la realidad de las cosas. No voy a caer en ese juego en el que siempre te las apañas para tener la razón. No tergiverses ni mis palabras ni mis hechos. Yo tomo mis propias decisiones aunque me equivoque. Y si te enfadas, dos faenas tienes.

No me hagas mil y una promesas que se pierden en el camino. No necesito rosas rojas ni un beso a destiempo. No necesito que me digas lo guapa que estoy, lo buena que soy... en el momento en que sé que tienes otras intenciones...  Te conozco demasiado bien. A veces me incomodas, me alteras, me pones de mal humor, pero ¿sabes? 

No necesito ser salvada. 
No soy la princesa ingenua de tu cuento. 
Soy Reina y Señora de mi Vida y de mi Cuento.



***  ***  ***  ***  ***  ***  ***  ***
¿Víctima o verdugo?
Chantaje emocional.

Este es el tema que nos propone para esta semana Pepe, desde su blog “Desgranando momentosque podéis visitar picando en el título y conocer también al resto de participantes.

32 comentarios:

  1. Libre de tomar tus propias decisiones en la vida.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  2. Demasiados chantajes emocionales hay en esta vida, así como realidades que se manipulan, tú lo has expresado genial, Mag, me ha gustado mucho tu texto, y ese final mucho más.

    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nadie está libre de este Pecado, Marieta. En realidad, creo que tod@s hemos sido tan chantajeados como chantajistas. Tal vez no con la intensidad que yo plasmo pero siempre jugamos con eso.

      Mil gracias.
      Un besi.

      Eliminar
  3. Fortaleza mental, autoestima, seguridad en uno mismo es lo que hace falta para no dejarse llevar por ese tipo de chantajes.

    Beso dulce.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No siempre es fácil se así de fuerte. Tal vez la experiencia, como dicen, es un grado.

      Gracias por venir.
      Un beso enorme.

      Eliminar
  4. Me parece que intuí cual iba ser la forma que ibas abordar este tema, que ibas a referirte al chantaje emocional para ejercer ese pecado que tiene una trastienda. Y reinvindicaste la forma de decidir cuando y con quien practicarlo.
    Casi que vi a una princesa épica enfrentando al rival, devolviendo golpes de espadas. Una metafora de la forma contundente de rebatir al manipulador. Eso de amenazar con no querer vivir es decididamente patético.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me vas conociendo, Demi :-)
      Soy transparente. Enseguida se me capta. No tengo interés alguno en esconder nada.

      Dicen que no hay mayor desprecio que no hacer aprecio. Cuando quieren captar tanto tu atención y manipularte en todos los sentidos, lo mejor es ponerse una coraza y que todo rebote. Fácil no es, la verdad, pero quién dijo que tenía que ser así.

      Un beso enorme.
      Gracias por pasarte por aquí.

      Eliminar
  5. Eso es seguridad, saber que uno vale más de lo que el otro cree. No siempre se da así, pero me encanta cuando uno pone los puntos, se planta y se salva de cualquier intento de chantaje contra su persona.
    Un gusto leerte.
    Abrazo enorme.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No es sencillo abstraerse de semejante contienda pero con el tiempo se va aprendido que siempre es más importante lo que uno crea que es y cómo es... siempre y cuando sea en sentido positivo. Cuando alguien intenta cambiarte, manipularte... en realidad, no te quiere ni poco ni nada.

      Besos grandes.
      Un placer verte por aquí.

      Eliminar
  6. La seguridad en uno mismo y el saber decir no es el arma para defenderse de esa manipulación, lo has plasmado muy bien.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, San. Escrito queda bien pero de fácil no tiene nada. Lo sabemos, pero sí...El poder está en un@ mism@ solo que no siempre lo vemos o nos dejan que lo veamos.

      Besos. Gracias por pasarte.
      Nos vemos el jueves.

      Eliminar
  7. ¿Qué te digo yo que ya no sepas? ...la pensamos igual.
    Nadie puede chantajear o hacer del mal, sin nuestro consentimiento. Es decir, soy yo quien deja (o no) que el otro me chantajee, que el otro me hiera, que el otro me humille ...y ¿¿todo eso en nombre del amor?? ...pues no! ...eso es todo menos amor. Pero repito, ¿qué te digo yo que ya no sepas?

    Besotes hermosa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo que sucede, Almi, es que a veces somos muy cobardes y nos conformamos en pensar que "ya cambiará", y en esa esperanza nos vamos consumiendo.
      Y no es ni amor lo nuestro hacia esa persona, ni lo de esa hacia nosotros.

      Besos enormes. Nada más que decir. Ya vos sabès.

      Eliminar
  8. Todos, en algún momento hemos sido sometidos a chantaje emocional y todos igualmente lo hemos ejercido aunque no hayamos sido conscientes de ello. Sin embargo una relación adullta no debe estar basada en manipulaciones ni chantajes sino en la libertad individual.
    Gracias por sumarte a mi convocatoria. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Pepe. Gracias a ti por la convocatoria y por manejar este tema que, como te he dicho, de fácil no tenía nada pues toca la fibra.

      Y no puedo estar más de acuerdo con lo que dices. De niños, es algo innato pero cuando vamos aprendiendo y sabemos razonar... ya no es excusa.

      Un beso enorme y te veo en poquito.

      Eliminar
  9. Plantar cara al chantaje emocional, ojalá todo el mundo tuviera el valor, el coraje de mirarse al espejo y reconocerse fuerte, válido, invencible...
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Rosa. Bienvenida de nuevo.

      Fácil no es. Ya lo he dicho pero también se sabe que pocas cosas hay imposibles. Lo que sucede que el chantaje es, en ocasiones, un placaje tan continuo que mata, que hiere... y cuesta zafarse de él... pero una lucecita en el interior acaba saliendo y te da la fuerza que hace que el cielo se abra.

      Un beso enorme.

      Eliminar
  10. Igual que Rosa, pienso que ojalá todos tuviéramos ese valor para decir las cosas de esa manera...A mi me costó muchos años saber defenderme del chantaje emocional que me aplicaba ,mi madre para lograr que hiciera las cosas como quería....lógicamente hubo una especie de batalla campal por un tiempo hasta que entendió que yo era una persona independiente y que no podía tomar las riendas en los asuntos de mi familia..opinar si..mandar NO!..Ahora ya nos llevamos bien..aunque con distancia...besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para algunas personas cuesta mucho discernir entre la propia vida y los propios entenderes y aquellos de otra. A veces, se proyecta sobre los que más cerca tenemos rayos que, en vez de ser de luz, son de sombras.

      Yo he tenido la suerte de tener unos padres que han dejado siempre que tuviera mi espacio, que aprendiera a caerme para saber levantarme pero sé, y lo tengo cerca, que hay otros que coaccionan y condicionan tanto a los hijos que hacen de ellos lo que nunca quisieron, pero se ciegan y se siguen empeñando.

      Las distancias prudenciales son las mejores. Me alegro de que todo ande solucionado.

      Un beso enorme y un fuerte abrazo.

      Eliminar
  11. Fue como decir, ¡Basta!, pero qué camino tan más difícil debe haber llevado para llegar a ese momento en que la decisión es firme, muy buen relato, el otro lado de la moneda, cuando te liberas.
    Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Son muchos pasos dados, muchos pensamientos, muchos lloros... pero, al final, todo eso es una bola que te golpea dentro de tal modo que o te quedas o explotas. Y explotas porque es la vida propia, los propios sentires.

      Me alegra que te guste mi blog. Yo no había ido nunca al tuyo. Lo he conocido ahora al irte a comentar. Ya me he hecho seguidora. Iré a verte, aunque sea de jueves en jueves.

      Besos grandes.

      Eliminar
  12. No es fácil mantener el tipo por mucho tiempo, agota y cansa, quieres ceder para que todo pare, pero sabes que no debes, no puedes... Hay que mantenerse fuerte ante las decisiones, querida mía, aunque la vida se vaya en ello.
    Huy, esta entrada...uffff, Mag.

    Mil besitos y feliz fin de semana, preciosa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí que cuesta sí, esperando a que todo cambie se te va la vida. Así que un día, después de mucho pensar, te levantas y dices, hasta aquí... Pones los brazos en jarra. ¿Y ahora, qué?

      Son cosas que tocan, ciertamente.
      Besos enormes y disfruta tu finde.

      Eliminar
  13. Eso es lo que un manipulador emocional se merece. Veo tu relato como la declaración de independencia de alguien que estuvo sometido a chantaje emocional. Imagino al chantajista desarmado, acabado.
    Buen relato, besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como alguien dijo por arriba, una princesa que se cansó de coronas de flores, que cogió la corona y se la hizo comer a ese príncipe encantador :-) y lo destronó.

      Mil gracias por tus palabras Un beso enorme.

      Eliminar
  14. Soy reina y señora de mi vida y de mi cuento...Que final! Apoteosico, como dejar a un chantajista sin argumentos. Magnifico me encanta, besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es, Molí... Todas sus armas se acabaron. Una única palabra bastó para derrotarl y una mano para abrir la puerta.

      Un beso muy grande.

      Eliminar
  15. Una efectiva manera de zafar de las manipulaciones: convertirse uno mismo en manipulador. Poco digno quizás, pero efectivo según cuentas en tu historia.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  16. Hola, Neo.
    En realidad la única manipulación que hace ella sobre él es terminar por ignorarle, por no no hacerle caso y tomar la decisión de sacar pecho y decirle que se acabó.
    Un golpe en la mesa aunque se rompa la vajilla.

    Un beso enorme, guapa. Te veo el jueves. Buena semana.

    ResponderEliminar
  17. Un excelente alegato. Una sumatoria de argumentos que tiran por tierra la mala intención de un chantajista.
    Mucha fuerza y entereza hace falta, pero qué duda cabe qué es lo mejor...?
    Muy bueno Mag, leerte hoy me dio ánimos Por si acaso fuese necesario...

    besos

    ResponderEliminar

Sueña porque soñar es vivir y vivir es sentir...