Dormía en la languidez de la noche claroscura,
a media luna, donde las sombras se refugian en los recovecos de mi piel y se
escapan de entre las arrugas de mis sábanas.
Y a mi espalda, se acomoda el susurro
hecho hombre a la rectitud de mi espalda y a la plegaria de mis piernas.
Y despierto, aunque mis ojos deciden
seguir durmiendo pero mi mente vuela y mis sentidos se avivan.
Reptan tus manos como serpientes
encantadas por el sonido apaciguado de mi respiración mientras, dulces, las
palabras que no se dicen, claman en mi nuca en busca de mi boca. Y es así, en
tanto la curva más recta de su hombría, como santo grial, se eleva entre las
estrechas montañas que se encumbrar al final de mi espalda. Y esa mano, tu
mano, se ancla varada en la hipérbole de mis piernas, erigida entre Venus y el
infinito más oscuro…
Hurgas, invades, maestra tu mano, los
pliegues cerrados y húmedos de unos labios que no hablan pero que lo dicen todo
mientras, los que sí que hablan se ven tiernamente violentados por carne y
saliva, por el latigazo profundo de una lengua que responde a la llamada de la
mía.
Tú, el hombre que susurra, te
conviertes en marea de mi puerto sufrido de tus avatares, de los vaivenes
sosegados que elevan más los altos de mis pechos que presto apresas con tus
dedos, y humedecen más los anclajes que coronan mis piernas.
La pasión . . . beautiful.
ResponderEliminarBienvenido seas, Rick, Encantada de acogerte en mi casa y ofrecértela con sinceridad.
EliminarLa pasión, ¿hay algo mejor que eso para lograr lo que un@ se progonga?
Besos.
Boca que pronuncia aunque calla, de tus palabras, las más ansias ganas , reptando por su hombría, la lengua que es verbo y latido.
ResponderEliminarUn tierno beso, preciosa.
Solo me cabe decir Amén a tus palabras...
EliminarSerpiente soy, de pecado y pureza.
Besos grandes.
Las palabras llevan a su ritmo el mismo tono que invita a sentir. Me ha gustado tu texto de hoy. Aunque creo que más que maldito, ha de ser bendito quien provoque todo aquello en la nocturnidad.
ResponderEliminarBesos dulces.
Su nombre es maldito por los placeres que le otorga...
EliminarMil maldiciones sean dichas cuando tanto recibe pues él hiedra y ella muro, él la gana.
Besos.
Simplemente sublime...
ResponderEliminarAlmita, nada que decirte que ya todo lo sabes.
EliminarUn beso.
La pasión a escena!!!
ResponderEliminarLa Pasión siempre ha de vibrar en el ambiente... En todo.
EliminarBesos.
Me encanta eso de "hurga, reptan tus manos..." Me lo dice todo
ResponderEliminarA tus PIES
De eso se trata, Gude, de descubrir... De ser un animal en el mejor sentido de la palabra.
EliminarBesos.
Sensual y pasional hasta el más leve punto de ortografía... Estupendo. Así ¿quién no iba a ser nocturno?
ResponderEliminarBesos Carnales.
Me encanta el embrujo de la noche, de las sombras...
EliminarSabes que me gusta mezclar y darle el punto a cada cosa.
Es como el baile de una serpiente.
Besos.
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