Años llevo caminando estas mismas calles. Siempre en el mismo mes.
Siempre en las mismas horas.
Siento las piedras que hablan de nosotros. Miro, con otros ojos, sí,
las que levantan una a una las casas de este pueblo, las que pueblan las
empinadas y estrechas calles. Me paro al borde del muro, dejando a mis pies el
precipicio que en el fondo perfila un río cuyas aguas saltan sobre las piedras.
Nubes parecidas. Unas tras otras en un intenso azul celeste.
Y unas palabras repicando en mi mente. Una pesadilla.
Algún día, Mag, estas mismas piedras que
nos amparan, estas mismas calles… Este mismo perfume que me embriaga, que ensalza
mis deseos por ti, que impregna mis sentidos para recordarte en cada momento
que no estamos juntos…
Algún día, Mag, en algún momento, pasado
un tiempo… No sé cuánto… No sé cuándo… Percibas de nuevo este perfume mío: El
perfume artificial de mi piel, el que
impregna mi camisa, sí, de esas que te sientan tan bien…; el perfume de mi piel
desnuda que se baña de la tuya cuando nos amamos, cuando nos rozamos…
Créeme… Un día volveremos a estar juntos.
Te lo prometo…
No somos un amor a destiempo. Somos
atemporales.
No lo olvides.
Te amo y te amaré.
Suspiro hondo. Demasiado tiempo. Demasiados anhelos. Demasiadas ganas
de volver a encontrarlo. Sí, en otros cuerpos, en otros ojos… Sí, eso nos
decimos… ¿Cuántas vidas? ¿Cuánto tiempo de espera? No volverá. No, ahora no.
Por mucho que yo crea… No, no volverá…
Demasiadas veces leída su carta. Tanto como para aprenderla de memoria,
tanto como para tratarla como un tesoro entre mis manos…Tantas veces arrugada con rabia.
No volverá ese aroma que le hacía único, porque en Él ese perfume es
único. Nunca antes. Nunca después. Esas esencias, esos matices de madera especiada, helechos, bergamota, cedro…,
pimienta rosa…
Solo su piel podía oler así.
Tan único, tan Él…, como el sabor salado de mis lágrimas. Las que no
puedo contener. Mis lágrimas por su ausencia, por la imposibilidad de volver a
estar con Él…
No sé si oí, si escuché… Si lo imaginé de primer momento… Pero me llegó
ese perfume, ese aroma Único. Sí… Miré.
No eran sus ojos pero sí su mirada.
No era su piel pero si su perfume.
No era su cuerpo pero sí su alma.
No era él pero sí es Él.
No era ella pero si soy YO.
Solo para ti que, con tu alma, lees y tocas la mía.
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Esta semana, en los Relatos de los Jueves, Dorotea nos encamina a descubrir un mundo de aromas, olores,
perfumes…, a través de su blog “Lazos y Raíces” que podéis conocer picando
sobre el título del mismo, y de paso, al resto de participantes.
Yo he elegido un tema que me apasiona: Las
almas que se pertenecen.
Real o no, solo espero que os haya
gustado.
Beautiful.
ResponderEliminar(You can see her breath.)
Comparte la pasión.
xx
Thanks for your words, Rick.
EliminarLove beyond love is as well ...
Kissess!
Hola amiga: una historia que es una poseía de gran calado. un amor inmenso, un dolor irreparable y un dulcísimo recuerdo de las fragancias de él,que jamás se olvidan.
ResponderEliminarUn abrazo perfumado de canela.
Es como la vida misma. Son dos almas que se aman por encima de todo aunque las mentes de quienes la contienen no lo saben, pero ellas sí, las almas lo saben mucho antes que el corazón, que los ojos cuando se vean por primera vez...
EliminarMe gusta ese abrazo con aroma a canela.
Te dejo el mío, sincero. Y un beso.
Las almas gemelas que se pertenecen y alli como en un sueño ahora hecho real lo vivo...
ResponderEliminartu relato emociona , porque es asi como lo cuentas ...
al menos como yo tambien lo veo .
Almas que son eternas siempre mas allá de todo , del tiempo, en otras vidas ..
Besos dulces y feliz fin de semana
Sé que lo ves así por eso te emociona, porque lo sientes...
EliminarYo así lo siento y lo vivo, desde siempre... No importa cuándo, cómo, quién... Es y es así.
Un beso enorme y gracias pasarte.
Almas que no se tocan pero que se abrazan, que se leen, se miran, se sienten, se desean, palpitan sus cuerpos, se respiran, se saben que están por encima de todo. Almas encontradas en el camino, El en Ti, Tú en El, ambos amantes en un mismo camino desde el silencio enlazados en cada suspiro. Unico en Ti como Señor, Unica en El como Señora. No podéis volver a encontraros porque desde tiempo os encontrásteis, y ya os tenéis el uno en el otro, unidos en un mismo camino y sentimiento.
ResponderEliminarUn placer leerte, Mag.
Un beso pecaminoso.
¡Madre mía, Marieta! ¡Cómo lo has descrito!
EliminarEs así, así lo vivo yo. Lo sabes. Todo desde el fondo de la esencia más imperceptible.
Es verdad, tal vez jamás nos encontremos porque ya estamos, ya somos.
Un beso enorme y, de verdad, mil gracias por lo que siempre me dedicas. Aquí, allí, allá...
Pues es muy bonito todo lo que describes, tan intenso...me gustaría poder sentir así algún día...sólo alguien enamorado es capaz de hacerlo...
ResponderEliminarUn beso
Nunca se sabe, Charo. La vida tiene ese extraño encanto que te hace descubrir un alma como la tuya, afín a ella, cuando menos lo esperas... El tiempo nuestro, corporal, no es como el tiempo de las almas... por eso, no sabemos cuándo dar con ellas. Solo aparecen, se encuentra para seguir amándose.
EliminarUn beso enorme y mil gracias por pasarte y decir esas palabras.
Las almas que se pertenecen y las palabras que crean ese ambiente atemporal de amor vivido y sentido cuyo rastro es más que un olor un aroma inolvidable. Un abrazo.
ResponderEliminarEs algo que está como tatuado a fuego en esas almas, algo que traspasa todo entendimiento. Solo cabe sentirlo.
EliminarUn beso enorme.
Perfume y piel se unen en una alquimia personal que hace que esa conjunción se transforme en el aroma especial que llega a identificarnos, si a eso le sumamos el amor que potencia dicho poder de permanencia, ni el tiempo ni el espacio serán barrera como para obstaculizar su llegada. Un abrazo
ResponderEliminarHay cosas, situaciones, sensaciones... que solo pueden vivirse, vivirse desde la intensidad del alma... Dejar fluir.
EliminarMe gustan tus palabras, Neo.
Un beso muy, muy grande y mil gracias por tus palabras y por venir a visitarme.
Cuando se siente pertenecer a ese otro... se siente que esa otra alma tiene tu misma melodía... no importa las idas y venidas... no importa las vueltas que den... no importa ni siquiera cuánto se luche (a veces) por combatir ciertos sentires... se está, simplemente porque se es... por siempre... desde el inicio de los tiempos y en eterno.
ResponderEliminarBesotes hermosa.
Las idas y venidas, en muchas ocasiones, se deben a que un@ no asimila ciertas cosas, no llegan al alcance, parece inexplicables... pero es lo que tienen las almas: No hay que analizarlas. No se puede.
EliminarComo bien dices, se ES y punto. No cabe más que que sucumbir a ese destino de las almas.
Un beso enorme, niña. Gracias por estar siempre.
Impresionante tu olor, ha invadido toda mi imaginación y se ha ido expandiendo conforme mi lectura iba avanzando.
ResponderEliminarHola, Tracy. Gracias y te dejo mi sonrisa porque si he logrado que mis palabras lleven aroma y sentimiento, ¿qué mas puedo pedir si han logrado envolverte?
EliminarUn beso enorme.
Esas palabras bien que hubieran podido salir desde el fondo de mi corazon...pero las has dicho tu y suenan mas lindas...besoss
ResponderEliminarMás linda no. Solo más en mí.
EliminarMe es grato haber coincidido. Y las palabras, tuyas son.
Besos enormes.
No es algo que se sepa, más bien es algo que se siente, que se vive entre la magia que de ambos se desprende. Todo vuelve a ser, porque así es como debe ser.
ResponderEliminarBeso dulce Magda.
Así debe ser porque es algo predestinado desde años ha...
EliminarEs algo implícito en nuestra esa otra vida. Sabes bien de qué hablo.
Como debe ser...
Un beso enorme, Dulce.
Almas gemelas que sin estar cerca se perciben y cuando se encuentran sin haberse buscado todo se vuelve magia
ResponderEliminarUn beso
Todo es otra forma de sentir, de vivir, de estar...
EliminarSon esas almas que se perciben en su intima esencia... sin piel, sin huesos, sin carne... sin trabas. Libres, como solo puede ser un alma.
Un beso enorme.
Uffffffffffffff caray con el perfume... nunca utilicé pero habrá que ir pensando en hacerlo después de leerte.
ResponderEliminarA tus PIES
Hay perfumen, Gude, que traspasan todo...
EliminarElla huele lo que recuerda y está calado en ella pero a quién siente es a él, a su alma, al alma de Él.
A mis pies.
Olores que forman parte de un amor muy intenso.
ResponderEliminarUn saludo.
Un saludo para ti también. Gracias por pasarte por esta casa.
ResponderEliminarOlores que saben...
Más que gustarme... me ha fascinado todo el contenido, llegas a rozar la verdadera esencia que poseemos, la que no se ve pero se siente, de almas...fragancias, aromas, esencias viviendo en los tiempos. Ainnsss, me has traspasado con esta entrada, Mag.
ResponderEliminarMil besitos, preciosa y buen fin de semana.
Gracias, Aurora. La verdad es que me sensibiliza leeros hoy a tod@s. No sé, es como si de verdad se sienta esa esencia de la que tú hablas, que la sientes... Y, ¿sabes? Yo sé que existe porque yo la vivo.
ResponderEliminarUn beso enorme, muy grande, y disfruta mucho de la vida. Sonríe.
Dices que las almas destinadas a encontrarse se reconocen cuando se encuentran. No te falta razón, yo encontré ese alma gemela a la mía un día, paseando por la calle y lo tuve claro desde ese mismo instante. No podría haber sido ninguna otra. Eso sí, no le día opción a alejarse, percibo a diario su olor especial y desde entonces caminamos juntos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Me alegro tanto, Pepe, por tu alma y por la de esta otra persona. No hay nada más bonito que eso, te lo aseguro. Y sí, te das cuenta enseguida, aunque el alma se da cuenta antes... por eso acabamos encontrándonos...
EliminarEnhorabuena por esas almas...
Un beso enorme.
El amor hace que se sienta uno así, transportado a otra dimensión, Intenso sentimiento el que nos describes, lleno de olores.
ResponderEliminarBesos.
Un amor tan intenso que tiene su propia esencia, indescriptible.
EliminarGracias por pasarte.
Un beso enorme y hasta otro ratito.
Muy bien reflejado ese momento en el que los olores definen una situación y una persona. Un viaje de ida para recuperar algo que está sedimentado en el fondo de nuestros recuerdos, aunque sea una carta...
ResponderEliminarBesos
Hola, Alfredo. La carta es como una llave, una llave para abrir un momento que está perdurable en el tiempo.
EliminarEl amor es la verdadera esencia.
Un beso enorme. Hasta el jueves o antes.
El amor, las almas gemelas tienen ese poder, el poder de transportarnos, de sentir el olor ya sea real o imaginario. Gran relato, tramado con la pérdida irreparable y el recuerdo de una fragancia inolvidable.
ResponderEliminarBeso
Y la reencarnación del alma...
ResponderEliminarMil gracias por pasarte, Yessy. Un besazo enorme.
El aroma del anhelo...del deseo y, en el fondo creo que, de la esperanza...una maravilla de texto...pero sobre todo, me encanta esa corriente que se me ha quedado al leerlo...en el fondo...como un aroma que perdura en el tiempo cuando algo o alguien ha pasado por donde estábamos...
ResponderEliminarBesos
Mil gracias, Max :-)
EliminarEsa es la sensación. Ese regusto de alguien que ha formado parte de tu vida, tan esencial, que no se va por nada del mundo... y una promesa cumplida...
Besos grandes.
Que preciosidad! me has llenado el alma, cuando sientes que alguien es ya una parte inseparable de ti, este a tu lado o no, cuando su olor te acaricia a cada instante, eso es amor en toda su inmensidad. Es bellisimo, besos.
ResponderEliminarHola, Molí, guapa.
EliminarMe alegra tanto que te haya gustado y te haya llenado el alma porque habla de almas, de almas que se aman...
Un beso enorme y muchísimas gracias.
Nos vemos en ya.