Aún no he abierto los ojos, si supiera dónde los tengo, que ya he
tropezado dos veces con la cama, cuando no es con la esquina de la cómoda o me
doy de bruces con la puerta de la habitación. Llego a la de casa y, sin darme
cuenta, regreso sobre mis pasos. El desatino me lleva a un rincón de la
cocina, y con apuros el café se vuelve una ducha inesperada, amén de que las
galletas son el pretexto perfecto para una lucha mañanera con el gato. Obvio
que acaba ganando y relamiéndose de gusto. Gusto que no me da a mí el perderme de
nuevo pasillo adelante y quedarme rezagada en el baño, donde cuatro gotas mal
caídas me hacen patinar hasta chocarme con la bañera en la que, apoyadas, duermen
las toallas con más pena que gloria.
No hay relax por la mañana. Esto es un sinvivir. Al menor descuido se
produce una catástrofe: Un poco de color aquí, una rayita allí, otra aquí… Hasta el perfume se vuelve en una especie de ritual de la mala suerte
porque tras ella llega esa avalancha de toallitas que pretenden enmendar el
desaguisado….
Y es que ser quién soy es lo que tiene: que cuando no hay pie derecho, hay
izquierdo y, cuando no, los dos. Te llevan de cabeza para terminar dándote una
patada en el culo y ¡¡a volar, pajaritos!!
"La pelota roja" | Óscar Domínguez |
Esta es más o menos mi vida, hasta que me harte y explote o haga mutis por el foro, aunque cabe decir que es muy grato verle feliz. Llevo una vida de pelotas :-)
Otras versiones en el blog de Mujer Virtual,
Qué bueno. Me encanta!! Y un final contundente y con carácter.
ResponderEliminarY la pintura, magnífica. Casa perfectamente con el texto.
Yo esta vez me he animado a participar. No sé ni cómo lo he hecho; voy liadísima. Pero bueno, que me quiten lo bailáo jajaja
Bsoss enormes, y muy feliz tarde, mi querida Mag 😘
A veces se sacan ganas de donde menos esperas. No se sabe el cómo ni el porqué pero el producto resulta. Luego te leo.
EliminarUn beso enorme.
No es para reírse cuando un día sale así... pero pareciera de circo. Me ha encantado leerte y has conseguido robarme una carcajada...
ResponderEliminarMil besitos, Mag y feliz tarde ♥
Si fuéramos una pelota... Tendríamos una vida así y más si hubiera un nene rondando, pero ¿te imaginas tenerla? ¡Ufff!
EliminarDíselo a un juguete del bartolillo ese de color naranja :-) :-)
Besos.
Amiga tener una vida de pelotas no esta mal , pq eso imprime caracter es bueno muy bueno ajjaja ..
ResponderEliminarMe gusto como llevaste el resto y la imagen es muy buena tan bien así pues aprobada ajjaj .
Un fuerte abrazo y te deseo un feliz día .
Lo cierto es que hasta la mitad nos humanizamos. Al final ya, nos resignamos. Algún día así no lo conozco pero parecido sí. ¡¡Desesperante!! Y duele hasta la punta de los dedos.
EliminarMuchos besos.
Si los objetos hablaran la de cosas que nos reprocharían.
ResponderEliminarSiempre que vengo sé que tendré algo especial para leer y no ha sido la excepción, gracias
Muchos besos
Hola, niña.
EliminarNada, la vida es cómo nos la montamos. Ya ves: Unos nacemos clavos y otros, martillos :-)
Besos grandes.
Muy buena participación me parece dificil escribir sobre un tema dado pero lo has resuelto genial. No se con que pie me levanto o inicio el camino. Abrazos con los dos brazos a la vez
ResponderEliminarYo suelo poner los dos al mismo tiempo. Luego, pues suelo tropezar con uno o darme, más de una vez, en el lateral de la puerta... Ahí sí que soy como una pelota : Reboto.
EliminarNo siempre es fácil, como dices, escribir sobre algo dado. A veces facilita el porqué pero siempre sale algo. En caso contrario, no agobiarse. Hay más días.
Muchas gracias y besos.
Me ha gustado mucho y verdaderamente hace honor al título :)
ResponderEliminarUn beso grande, Magade.
Gracias a ti por venir, Sak:-)
Eliminar¿Por qué te crees que nos han dado dos pies y una cabeza?
Un beso enorme.
Si el pie izquierdo hablara lo haría de esa forma, como dije en el blog de Gine está estigmatizado el pobre. original enfoque le has dado.
ResponderEliminarBeso dulce y dulce fin de semana Magda.
Si la pelota tuviera pies... saldría por patas :-) aunque tropezara.
EliminarMuchos besos y feliz tarde.
Jeje, hay días en que uno se tienta a pensar que está «meado por elefantes» jeje. Un abrazo
ResponderEliminarEso no lo había oído nunca pero ¡¡¡caramba!!!
EliminarEso es peor que ir a por lana y salir trasquilado.
Besos :-)
Jajajajaja, una vida llena de pequeñas catástrofes y grande buen humor.
ResponderEliminarAbrazo.
Siempre hay un motivo para sonreír aunque sea yendo con el pie izquierdo y tropezando con el derecho.
EliminarUn beso, Tristán.
Uy, cuantos contratiempos. Y parecen que son indicios de la necesidad de cambio.
ResponderEliminarBesos.
Me parece a mí que esto es como eso de: "El que nace para martillo, del cielo le caen los clavos". Lo que nace pelota... así se queda...
EliminarUn beso muy grande.
Que original....y yo que he estado dando vueltas cual pelota hasta darme cuenta...es genial, besos.
ResponderEliminarJajajaja...! Precisamente, vueltas es lo que da la protagonista.
EliminarY aunque no te hubieras dado cuenta, yo encantada de verte por estos mundos.
Un beso muy grande.
Si se te abolla mucho la pelota me la mandas que casi casi me recibo =)
ResponderEliminarEs genial tu relato
Saludos
¡Me sonrío! Gracias.
EliminarPara ahí va... Ya sabes qué vida lleva.
Un beso enorme y mil gracias.
Mi ídola eres...en serio. Cada vez que abro tu blog ya se de antemano que será algo muy bueno,por eso, cada vez que puedo participar,me agrada mucho leerte...Excelente relato que te lleva a un sorprendente final...que vida de patadas lleva tu personaje jajajajja...besitos
ResponderEliminar¡Exagerada! Pero muchísimas gracias. Me alegra verte. El verano nos ha dejado a media vela un poco a todos. Para mí es un gusto encontrarnos de nuevo.
EliminarUn beso enorme :-)
ResponderEliminarUn texto melodramático, con sus pinceladas de humor, sobre la vida diaria, y nada menos que ambos pies. Claro que si, no hay izquierdo ni derecho, sino ambos que nos llevan (algunas veces, entre tropezones y caídas) y no queda otra que, al mal tiempo buena cara, o seran pies? Muy ocurrente tu relato, Mag. Me encanto!
Abrazo
Ahora no recuerdo el nombre que recibe esa cosa de cuando los objetos toman vida y se personifican.... ¡Ya me vendrá a la cabeza! Pero la vida, con patas o sin ellas, con piernas o sin ellas, es muy achuchada :-)
EliminarUn millón de gracias y un beso grande.