Vientos suspiran sobre dunas vivas
que se arrastran en movimiento inerme
como serpientes de lodo,
como caricias ásperas sobre piel yerma.
Oscilan.
Aliento que quema.
Rehílan.
Agujas de un reloj sin tiempo.
Crestas de luna en noches férreas y silentes.
Aves errantes que vuelan de mis manos
y vomitan sal sitiada en los ojos de mi alma.
Reviven del polvo,
entre piedras,
flores purpúreas en oración.
Gime el cielo
y sus lamentos son huella de mis pies.
Cuidan los silencios
mil sinos desbordados.
Aquellos pájaros,
hiedras engarzadas en mis dedos,
se inclinan sobre la tierra ahogada.
La besan.
La siembran.
La besan.
La siembran.
Y de mis lágrimas surge
como esperanza florida
con raíz fecundada,
a pétalos,
como esperanza florida
con raíz fecundada,
a pétalos,
la Vida...
Estas letras participan en la
convocatoria "catástrofes naturales"
A veces siento que es así... que todo lo que nos recorre tiene el alfa y el omega en nosotros, y de ahí la vertiente de la vida.
ResponderEliminarAdmirable, Mag... versos tan profundos que enraízan los sentimientos.
Mil besitos que te lleguen y feliz tarde ♥
La catástrofe más grande es la que nos asola por dentro. De esa cuesta recuperarse, en ocasiones, toda una vida.
EliminarUn beso enorme y gracias infinitas.
Veros donde el corazón se percibe. Esa nueva primavera palpitando entre las rocas y los fríos. La vida, regada por la lluvia de los avatares del tiempo.
ResponderEliminarBuen post. Un abrazo
Gracias, Albada.
EliminarEl tiempo, las desgracias personales y las ajenas, son como añadas sin pedigrí.
Un beso enorme.
Gracias :-)
Sin palabras Mag y que siempre fecunda la vida
ResponderEliminarBesos enormes
La vida es una olla donde hierve de todo...
EliminarUn beso grande y gracias siempre por estar.
Lo has hecho bonito aquello que es un terrible acontecimiento ..que más decirte que gracias por poner en la amargura una nota de aliento.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz noche muakkk.
Siempre deseo que haya una luz al final del camino aunque sea tan estrecha la boca que nos queme.
EliminarUn beso grande y gracias siempre a ti.
La vida , un camino entre piedras , unas más grandes, otras pequeñas, ideales para renacer entre ellas un castillo con jardines y en el...enredar nuestras raíces con el tiempo. ..El tiempo juntos...
ResponderEliminarMil besos princesa 😘
¡Qué bello lo dices, Jesús!
EliminarConocerte desde hace tiempo y sentir cómo sentimos y nos sentimos es la pieza angular que no s hace renacer de entre las sombras.
Más besos para ti :-) y mis gratitud siempre será pequeña.
La vida en su más pura esencia abriéndose camino entre piedras y tierra yerma…
ResponderEliminarHermosísimo poema cual oda sublime a la vida.
Un verdadero placer, mi preciosa Mag… Un deleite para el alma, en esta noche lluviosa…
Un abrazo grande 💙
Gracias por sentirlo de esa forma, sobre todo viniendo de alguien que tiembla entre letras.
EliminarUn beso enorme y mis gracias.
Precioso y como resultado de un todo, la vida. Besos.
ResponderEliminarSiempre, al final la vida envuelta en esperanza.
EliminarUn beso enorme.
Mientras surja la vida, vamos bien.
ResponderEliminarUn beso.
Ahí le has dado: en un Mientras cabe un Todo.
EliminarMuchos besos.
Una apuesta a la esperanza... precioso. Un abrazo
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Moni.
EliminarQue no nos falte la esperanza aunque a veces dejemos mucho en sus manos.
Besos :-)
Empleas el doble sentido de las palabras con tal maestría que tus metáforas son arte. Abrazos y cariños
ResponderEliminar¿Y que puedo decirte salvo agradecerte la presencia y las palabras?
EliminarUn beso enorme, Ester.
La vida es la esperanza más cierta, aún en catástrofes, aún en tragedias, si hay vida ha de existir esa fuerza para sobreponerse a lo adverso.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
La vid a tiene una fuerza que muchos no dan importancia y la destruyen como quien aplasta a un gusano.
EliminarPero es, en sí misma, esperanza.
Un beso Mi Estimado Dulce y mil gracias.
Y la esperanza surge, la vida misma continúa después de ser interrumpida violentamente por la madre naturaleza, así, pacífica como la seda.Hermosa la lectura de tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo!
La Madre Naturaleza es, eso, madre, y como tal nos da lecciones de vida aunque su manera sea la más brutal pero es que no aprendemos. Somos hijos rebeldes y tozudos sin darnos cuenta de que las piedras que tiramos caen en nuestro tejado.
EliminarUn beso enorme. Gracias.
Es impresionante tu poesía... Sublime!
ResponderEliminarUn beso enorme.
Muchísimas gracias, Sak.
EliminarBesos :-) .-)
La poesía se hace presente incluso en los peores momentos. También en las catástrofes naturales se hace un hueco la poesía mostrándonos la fuerza devastadora de la Naturaleza. Al final de tu poema se percibe un punto de esperanza. Me ha gustado mucho tu enfoque.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Muchísimas gracias, Pepe.
EliminarCreo que, como ya he dicho antes y digo siempre, ha de haber luz en medio de cualquier oscuridad.
Un beso enorme y gracias por tu iniciativa "tan apurada":-) .-)
La vida es lo que nosotros queremos que sea, en este caso, has desnudado el alma para hipnotizarnos.
ResponderEliminarBravo :)
¡Qué bello es eso, Amow!
EliminarHipnotizar el alma... es un concepto nuevo que te agradezco.
Un beso enorme. Gracias infinitas.
Que tenaz la vida! que corajuda!, que rebelde!, me parece de generosos acariciar las propias catastrofes personales
ResponderEliminarMagnifica poesía Mag
Abrazo
Somos los únicos que podemos poner orden dentro de nuestro propio caos. Empezar a reconocerlo es el primer paso para sanar y reconstruirnos.
ResponderEliminarMillones de gracias y un beso.
Hola Magade , así es el renacer de la vida... Detrás de una catástrofe , siempre nace una nueva vida , un nuevo despertar , un nuevo latir , me a gustado mucho tu poema , te deseo una feliz mañana de Domingo , besos de flor. ;) besitos preciosa mía.
ResponderEliminarHola, Bella Flor :-)
EliminarFeliz domingo también para ti.
Detrás de la tormenta, siempre llega la calma... aunque estemos sin alas y con los pies llenos de plomo.
Un beso enorme.
Después de la tormenta llega la calma. Dejas un final de esperanza, eso se agradece.
ResponderEliminarBesos.
Siempre ha de haber una luz al final del camino. Por muy pequeña que sea es la puerta que abre la esperanza.
EliminarUn beso enorme y mil gracias.
Tus palabras son como el fénix que renace de entre las cenizas; la muerte y la vida siempre van unidas.
ResponderEliminarVoy poniéndome al día y me alegro de volver a leerte, Mag.
Un besazo
A tu marcha, Dafne. No hay prisas y hay que ir pasito a pasito para disfrutar del paisaje.
EliminarAgradecida por tu presencia y comentario... y ya sabes que por muy oscura que sea la noche, siempre amanece.
Un beso enorme.