Me sonrío. Desde este último banco me muevo cerca del anonimato. Al fondo, el Santo Cristo. Entre Él y yo, los pecadores aunque ellos se creen santos y devotos porque se santiguan y oran el Confiteor agachando la cabeza y golpeándose el pecho.
Yo, pecador, me confieso […] que pequé mucho con el pensamiento, palabra y obra, por mi culpa, por mi culpa, por mi grandísima culpa.
Entorno la mirada. Observo. Doña Pura que tiene de pura solo su nombre y porque lo abrevia ya que es más sucia que el agua de fregar, y no por falta de higiene, abraza el crucifijo entre las manos. Qué decir de don Pascual, el vecino del tercero izquierda del número 3, que se trajina a la hija del carnicero cada domingo mientras la mujer reza el rosario. Luego, repeinado con gomina y oliendo a loción cara se junta con su esposa a misa de doce. Allí, en el tercer banco de la derecha, está la dulce e ingenua Estrellita, con su falda raspando las rodillas y el chal cubriéndole la melena cuyos rizos aún deben de oler a loción. Su padre la mira con una sonrisa. Su madre, altiva, orgullosa de su prenda. Y el calzonazos de su novio, el hijo del secretario del ayuntamiento, cierra los ojos y eleva su mirada velada al techo de la iglesia… mientras se confiesa los actos impuros cometidos entre la soledad de sus sábanas, pero todo sea en nombre del amor.
Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, […] Amén.
Y en acto de contrición, doña Elvira que reparte sopa entre los pobres después de misa teniendo a pan y cebolla al marido porque se gasta cuatro perras de la pensión en el bingo del bar mientras se ríe con los amigos con un chato de vino que le dura toda la tarde. Pedrito no se está quieto. Se cansa y su madre le regaña, reclamando a su padre, cornudo mayor del reino, que lo mantenga entretenido y quieto mientras el suyo, descuido adolescente, pasa la bolsa para la limosna. Tiene los mismos ojos y el mismo ensortijado en los pelos pero no es pelirrojo y pasa por lo que no es.
Y don José, párroco del pueblo, conocedor de la mitad de los pecados y creador de la otra mitad. Bajo su sotana, la resurrección del muerto… y la bendición de los pecados…
Me salgo. Lo mío no es la gloria de los cielos sino la perversión del Infierno. Ahí te quedas con tu cruz, Amigo. Ya te dije que la de madera es la que menos pesaba. No me hiciste caso. Además, no me apetece que digan que han visto al diablo en misa.
Texto que parte de la propuesta “La vida de otros” de Inma desde su blog "Molí del Canyer" donde puedes leer a otros cotilleos.
Retrato de sociedad.
ResponderEliminarRealmente, parece que hayamos cambiando... pero seguimos siendo os mismos "pecadores". Mismo perro pero con distinto collar.
EliminarUn beso.
Impresionante... ver al pecador con su disfraz... sentir la mentira en cada una de sus oraciones... y sonreír ante el triunfo de que cada alma lleva su cruz.
ResponderEliminarMe ha encantado, Mag... simplemente lo he disfrutado en todo su magnetismo.
Mil besitos que te lleguen y feliz día ♥
En el fondo somos capaces de ver la paja en el ojo ajeno porque la reconocemos en nosotros, salvo que la callamos.
EliminarGracias por tus palabras.
Un beso enorme.
Muy observadora, no es fácil estar atenta a todo lo que ocurre en los bancos. Abrazossss
ResponderEliminarA mí se me escaparían casi todos los detalles... porque suelo ser de poner en duda toda la verdad y de no confirmar jamás las mentiras hasta que me demuestren lo contrario pero está claro que cuando el río suena es que agua lleva, ¿o no? :-9
EliminarUn beso y gracias mil.
Ya lo di el refran " a Dios rogando y con el mazo dando".
ResponderEliminarBss.
Mismamente :-) En el fondo el diablo te dice la verdad, solo que nunca le creemos :-)
EliminarGracias y besos mil.
Tremendo relato y las observaciones del diablo, la verdad, fuertes pero parecen ser verdades que la sociedad oculta, tapa esa putrefacción y todo poniendo por estandarte a quien murió por redimirnos a todos. Has zurrado fuerte... A mi me sorprendió mucho el protagonista del relato. Sin duda, eres una mujer valiente. Un abrazo.
ResponderEliminarYo me llevo bien con el diablo, la verdad, y con Dios tengo mis más y mis menos :-) Es tener coherencia con las luces y sombras en las que nadamos.
Eliminar¿Quién mejor que el diablo, sabedor de todos los vicios y virtudes, para sacarlas a la luz?
Gracias por tu comentario.
Un beso.
Jolines, vaya repasada! De ahí no se libra ni el apuntador. Muy bueno, besos.
ResponderEliminarSeguro que él también tiene alguna cosa que pretende esconder y alguno sabe :-)
Eliminar¡Aquí no se escapa ni Dios! Ya ves :-) :-)
Un beso grande.
Gracias :-)
Como dice Pitt es un retrato de sociedad y yo añado hipócrita. Un abrazo.
ResponderEliminarCreo que es la verdad. No todo es negro ni malo, obviamente, pero tiene su halo oscuro de maldad y de menos maldad. Estamos hechos de virtudes y de vicios y faltas. Así somos.
EliminarUn beso y muchas gracias.
Apariencias, de eso que más abunda en el mundo y la religión no es una excepción, eso ya lo sabemos a estas alturas. El que esté libre de pecado que tire la primera piedra, no seré yo :)
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Bueno, yo más que de religión, ubico la historia en un lugar donde supuestamente todo es perfecto, donde todos estamos exculpados pero en ocasiones, pero hasta los lugares más puros se deterioran, se pudren...
EliminarYo tampoco tiro piedras, no vaya a ser que me reboten :-) o que alguien se las quede y le saque provecho :-)
Un beso enorme. Gracias mil.
Has hecho una verdadera radiografía de nuestra sociedad , lo has bordado . Pero tengo una duda el diablo no puedes ser tú ajjaja.
ResponderEliminarUn abrazo lleno de cariño . feliz noche .
Mujer, yo no soy mano de santo ni soy un alarde de virtudes jajajaj Tengo algo de picardía pero me falta mucha maldad, la verdad, pero con el diablo me llevo bien. Vamos, hay que tener amigos hasta en el infierno :-)
EliminarUn beso enorme. Gracias.
La falsa moral esparcida por cada recoveco de la vida…
ResponderEliminarMuy bueno, querida amiga. Entresijos de un mundo de mundos que nada son de lo que aparentan…
Lo has bordado 😉
Bsoss miles, y muy feliz noche 💙
Eso es, ni el blanco es pureza ni el negro, maldad.
EliminarSomos claroscuros donde para uno pesa más un lado que otro, pero, al final, tenemos de las dos cosas.
Hablamos a veces por no molestar y otras por no callar.
Un beso grande. Muchas gracias :-)
Una verdad verdadera que estoy por pensar que se da todos los domingos en la misa de las 12 que es la de más pedigrí.
ResponderEliminarClaro, ¿dudabas?
EliminarEs como eso de que hay más locos fuera que dentro del manicomio. Que por cierto, me gusta esa palabra. Suena bonita.
Un beso enorme. Agradecida :-) por tu comentario.
Mientras sigan siendo secretos a voces, todo está bien
ResponderEliminarMuy bueno, Magade, como siempre, un beso
Luego para que vayamos a confiar nuestros pecados al que nos hace la cruz. Es una metáfora pero no deja de ser reflejo de lo que somos. Y cuando digo somos, es en general, el que más por el que menos... todos tenemos ese pecado encima.
EliminarUn beso enorme.
Gracias :-)
ASistir a misa en un pueblo debe ser una crónica similar a la que nos propones. Ha de ser inquietante parecer sorda y ciega y muda cuando en la iglesia se conocen los "pecados" de todos. Hay quien, beatas sobre todo, imagino, viven la vida a través de la de los demás
ResponderEliminarUn abrazo y feliz viernes
Tengo por bien seguro. Muchas veces, quien más habla es quien más debe callar.
EliminarY hay quien vive la vida de los demás porque no sabe cómo vivir la suya.
Un beso grande. Mil gracias.
Quien va a conocer mejor de los pecados que cometemos, que el propio diablo.....eso diría alguien que creyese..., pero yo no creo ni en el diablo ni en el pecado...
ResponderEliminarEl pecado es algo subjetivo...relativo como la relatividad misma...yo creo en una sola cosa: vivir y dejar vivir...
Un relato muy pero muy excitante..
Besirelatos jueveros...
Mi concepción del Pecado y la forma en que hablo de él, así como la utilización de términos religiosos, se aleja mucho del beaticismo o de la fe de la Iglesia. Me gusta el juego de sacralizar el pecado, de utilizar la oración para oraciones que más que religión muestran el otro lado...
EliminarLo ideal sería vivir y dejar vivir pero siempre hay moscas que dan por saco todo lo que quieren, y momentos y personas que chismorrean y lo saben todo. Es algo innato en ellas.
Mil gracias por tus palabras. Un beso.
Al final, va a ser que el diablo no quiera a esas personas y han de tocarle al creador, muy bueno el relato, reflejo de lo existente.
ResponderEliminarBesitos
Hola, Vany. Yo creo que el diablo no está para estas tonterías y se desespera. Es un ser sobradamente preparado :-9 y su cualificación queda por encima :) :-) Somos como somos.
EliminarYasobre los blogs. He añadido a personas a mi "blogs de lectura" pero seguro que me dejo a alguien aunque la ventaja es que al movernos todos más o menos en un círculo, nos acabamos encontrando de modo indirecto. Somos muchos y llegamos en la medida en que podemos, sea cada día o una vez a la semana o en los retos...
Tengo dos blogs más activos: Este y "El Tacto del Pecado" (primera imagen de la columna lateral. Picas y entrarás). Tengo un tercero de no cuentos, completamente diferente, en el que publico cuando me acuerdo y me viene la inspiración, por general, una vez al mes: Caracolas en las nubes.
Un beso enorme y que disfrutes. Gracias mil.
https://desmotivaciones.es/4447329/Alli-donde-dios-tiene-un-templo
EliminarBesitos
No conocía esta frase peto te juro que me la apunto. Es muy buena y muy real.
EliminarUn beso y gracias :-)
Me ha impactado la verdad todo el relato y esa imagen tan intensa
ResponderEliminaruna maravilla Mag, eres la Reina , que decirte
en los relatos sobre todo me dejas son palabras
Besos enormes preciosa
.
Me gusta eso de Reina :-9 :-)
EliminarBromas aparte, mil gracias, de verdad. Intento, como todos, sacar lo mejor. A veces conseguimos estar más satisfechos de nuestros trabajos; otras, a salir del paso lo mejor que podemos.
Yo sé que soy algo descarada al hablar siempre en nombre del Diablo. Espero, solo, que sepa comprenderme algún día :-) y no me denuncie por usurpación de la personalidad :-) en voz que no en voto :-)
Un beso enorme y mil gracias.
Hola Mag,
ResponderEliminarQue original y espeluznante relato. Nada menos que el mismo señor del averno estuvo presente para chismorrear de los “santos” Menos mal que no voy a misa. No me hubiese gustado encontrarme con tu personaje. Genial y sorprendente final.
Abrazo
Esta vez fue a misa porque se le ocurrió :-) :-) creo yo, por dar en las narices más bien :-)
EliminarMil gracias por tus palabras, Yessy, y un besito.
Extraordinaria... como tú.
ResponderEliminarYa me estaban haciendo falta tus relatos...no digo tú, porque siempre has estado conmigo, y nunca me lo olvidaré.
Se te quiere... besisssssss Mag
Nada que decir, Almi. Las cosas son como son. Se está en la medida en que se puede y se brinda el cario como mejor nos nace. Y mis relatos, letras, como las de todos, con mayor o menos oficio, para pasar el ratito y echar dos risas. Disfrutar, ni más ni menos.
EliminarUn abrazo inmenso. Un beso enorme.
Gracias a ti.
¿Tiene sentido una religión que considera pecado, al pensamiento de un deseo, de una fantasía, cómo un pecado digno de ser castigado?
ResponderEliminarBien planteado esa observación de quienes dicen una cosa y hacen otra. Hecha por tan especial observador.
Una vez más, la inspiración te acompañó.
Besos.
El problema no es la religión que es un invento humano para castigar y premiar sus defectos y pocas virtudes. La fe no tiene religión pero a veces necesita pilares en los que ampararse pero nada tiene que ver con la religión.
EliminarPero vamos, para eso están los Pecados que unos consideran delicia, como bien sabes yo. Nada más placentero que los Pecados que se consideran prohibidos. Los otros no son pecado, son malicias y falta de lógica humana.
Un beso muy grande, Demi. Nos vemos y cuídate.
Gracias a mil.
Me he dado cuenta que no sigo a nadie, o casi nadie está activo
ResponderEliminarAmiga, cuántos blogs tienes?
Te respondí arriba. Besitos :-)
EliminarImpresionante relato, la realidad misma retratada de manera ingeniosamente genial, un abrazo amiga Mag, me encanto la lectura.
ResponderEliminarHola, Jorge. Mil gracias :-)
ResponderEliminarSomos un saco con huesos con nuestras marcas. Quien no es ladrón, pone el sacó y, quien no, se lo lleva todo o se queda sin nada. Todos estamos llenos de pequeños pecados :-)
Un besito y mil gracias por venir.