Objetos cotidianos
Monedas, un par de ellas de esas que deberían estar en un museo, una pluma cuya punta rae el papel, un peine de nácar de color grisáceo al que le faltan algunos dientes, un reloj de hora atrasada que podría ser la última, un juego de tres llaves de forja maciza, diferentes en su dentada, sujeto a una cuerda de esparto con varios nudos, un par de carretes de hilo, blanco y negro, el blanco casi negro y el negro casi blanco. Y todo metido en una descolorida caja de puros Condal número 5 que todavía conserva uno de sus sellos verdes. El paso del tiempo y de la vida parecen traer a mis manos recuerdos que nunca he tenido.
Levanto la vista sobre el horizonte, y llevo mi mirada hacia el finito mar, ahí donde se besa con el cielo que, profuso y arrebolado, se vence sobre su propio reflejo. Ondeo mis pensamientos de forma queda... pero desordenada, mientras un atisbo de lágrima parpadea en mi ojo izquierdo. Dicen que las lágrimas que brotan por el izquierdo ojo son de tristeza. Tal vez la pena me embriague o sea otra sensación que se le parece.
Quizá solo sean reminiscencias del alma que se visten de eco.
Quizá solo sean reminiscencias del alma que se visten de eco.
El destino se traza sobre mi vida dejando un halo de imágenes talladas sin memoria. El pasado late en alguna parte que desconozco. Un nombre, un apellido... Que no son mi nombre ni mi apellido. En cambio es algo mío, es algo que los huesos saben, que la sangre llama y el brillo involuntario de mis pupilar revela.
Esta es mi aportación a la convocatoria de Alfredo para este jueves.
En su blog "La Plaza del Diamante" podéis ver otras historias.
..."Allí donde se besa con el cielo..."
ResponderEliminar..."Ondeo mis pensamientos..."
Madre mía hay frases tan sublimes que me dejas sin palabras. Un texto descrito de lo mas bello. Una hermosa y brillante aportación la de tu relato.
Un beso y feliz tarde.
Muchas gracias, María.
EliminarMe alegra que lo veas así.
Un beso enorme y feliz resto de finde.
Esas imágenes de un pasado que están vivas todavía en la meten hacen que cualquier objeto te hagan recordar escenas de algo vivido.
ResponderEliminarNo sabía que las lágrimas que son derramadas por el ojo izquierdo son de tristeza tal vez por estar más cerca del corazón ?.
Un texto donde se echa tal vez de menos cosas que ya no están.
Un fuerte abrazo y feliz jueves.
Pues no tengo ni idea sobre eso de las lágrimas. Siempre lo he escuchado pero igual es un mito como otro cualquiera.
EliminarMuchas gracias por tus palabras, Campi.
Un besote.
Tal vez el alma nunca olvida lo que la mente sí. Un relato con emoción latente.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
O, quizá, intenta recordar recuerdos que no son suyos, Mi Estimado Dulce.
EliminarMil gracias siempre y un beso muy grande.
Objetos que nos hablan de épocas pasadas y hasta, de sus propietarios en algunos casos... y esos recuerdos que caen en forma de lágrima tienen todo el peso de una historia tan íntima como lejana en el tiempo. Se respira tanta quietud...
ResponderEliminarMe repito, lo sé, pero... es todo un placer leerte, mi querida Mag.
Mil besitos con mucho cariño y muy feliz día ♥
Siempre mi más humilde gratitud, mi querida Auro.
EliminarComo bien dices, habla de otros propietarios pero el sentimiento lo perciba la protagonista de la historia.
Un beso :-)
ResponderEliminarAlgunos objetos son maquinas del tiempo, nos hacen volver a revivir lo que paso o lo que pudo haber pasado.
Y se mueven olas en nuestro mar interior saltando por las pupilas gotas de nostalgia.
Un placer leerte siempre
Beso
Sí, es cierto. Traen al presente lo pasado y si no hay pasado propio, evocan pensamientos.
EliminarMuchísimas gracias por tus palabras, Charly.
Un beso.
me encantan esos objetos cotidianos antiguos, que cuentan historias de cuando eran utilizados. las llaves son como las huellas dactilares, no hay dos iguales.
ResponderEliminarinteresante el significado de las lágrimas según el ojo del que broten. lástima que yo sólo llore cuando oigo música reggaeton, de lo mala que es. ;)
besos!!
¿Cuánto no tendremos una caja de zapatos, de puros... donde guardemos o se hayan guardado cosas y al verlas nos vengan recuerdos propios y ajenos? Eso plasma mi historia.
EliminarBueno, si lloras por esa música, creo que eres fuerte para otras cosas :-)
Un beso, Chema.
Un relato muy nostálgico y poético, con una narrativa fluida que nos conduce sin problemas hacia ese mundo tuyo tan sugestivo y mágico. Un placer leerte. Un abrazo
ResponderEliminarGracias por reconocer en las letras mi impronta, Moni. Nos hacemos marcar y fluye de manera natural.
EliminarMuchísimas gracias y disfruta de tu finde.
Un beso grande.
me transportaste a una niñez y adolescencia que había olvidado, al final, creo que no todo fue tan malo como recordaba. Tengo sentimientos encontrados para sujetar el tema de esta semana, tú lo has hecho con perlas de nostalgia.
ResponderEliminarBeso, amiga
Me alegra saber que hay recuerdos ahí dormidos que aún puedes despertar buenas sensaciones, amiga.
EliminarEl tener sentimientos encontrados es que todavía la balanza anda inclinada para un lado más que para el otro, tal vez...
Un beso muy grande.
¡Hola! Me gusta tu forma de relatar y expresarte, en una composición relativamente breve has despertado mucho en mí.
ResponderEliminarTe sigo, te espero por mi rincón.
Un saludo.
https://marca-indeleble.blogspot.com/
Hola, Né, bienvenida a este lugar. Un placer poder saludarte.
EliminarGracias por tus palabras y sí, pasaré por tu casa, a ver de qué va el tema.
Muchas gracias.
Un saludo también para ti.
Un delicioso texto para saborearlo lentamente y más de una vez. Sólo tú puedes escribir así y con ese estilo tan tuyo.
ResponderEliminarHay objetos que, en efecto, disparan memorias y sentires más allá de nosotros mismos, que abarcan nuestro linaje.
Besos, querida Mag
Sabes que agradezco infinitamente tus palabras, Myr.
EliminarY es como dices, hay objetos que nos perfilan la memoria, aunque no sean nuestros ni nos hayan pertenecido.
Un beso enorme.
Genial texto que reúne los ejemplos propuestos. Son objetos que nos recuerdan lo que hemos sido, que nos traen al presente las sensaciones pasadas. Son máquinas del tiempo que atesoramos, a sabiendas de que el pasado está ahí, sin posibilidad de retomar.
ResponderEliminarMe ha gustado. Un abrazo
Así es, Albada, son como robasueños, recuperarealidades... si se me permiten las palabras.
EliminarSon de nosotros y son ajenos pero todos, sea como sea, evocan algo... Cuando no evocan nada, están muertos.
Muchas gracias, Albada.
Un beso y feliz domingo.
Esa lágrima del ojo izquierdo resalta en este hermoso relato, nostálgico, creo que ella como la mirada al infinito cielo y mas, se encuentran contando un recuerdo sin recuerdo pero que está.
ResponderEliminarUn abracito Mag :)
Ella enumera y se emociona por la disposición y por los objetos porque no son suyos. Son de alguien que tiene tanta fuerza que es capaz de removerle sus ajenos recuerdos.
EliminarMil gracias por tus palabras, Cecy.
Un beso.
Objetos que llevan a un pasado que se pierde, un alma que se empeña en mantenerse abierta mientras la memoria escapa. Un relato precioso, besos.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Inma.
EliminarEs una delicia saber que las letras tocan de algún modo.
Y es como dices, llevan a un pasado que se hace presente o se aleja, dejando preguntas sin respuesta.
Un beso enorme.
El sentimiento que desbordan esos objetos se hacen eco en mi memoria....sobre todo en este tiempo en que una espada cuelga sobre esta casa y presagia momentos duros y tristes....hay objetos que son una verdadera maquina del tiempo...besos mi querida Mag...encantada de leerte de nuevo
ResponderEliminarHola, Diva, me alegra volver a verte después de tu ausencia, me imagino que más que justificada. Siempre toca algo y la espada, tengo en cuenta, sea o no de Damocles, siempre puede romperse o desviarse. Así que mucho ánimo y mucha fuerza siempre que de todo se sale aunque cueste.
EliminarUn beso muy grande.
Bien planteado. Objetos que llevan a la contemplación interior, mientras se contempla el paisaje.
ResponderEliminarBesos.
Hola, Demi, puede ser una llamada desde fuera hacia adentro, como dices. Un sentimiento, una chispa, una ráfaga de memoria que no nos pertenece pero que nos llama.
EliminarMil gracias.
Un beso.
bello e inquietante y misterioso escrito, que me ha dejado con una sensación extraña, no sé como decirlo quizás una sensación de que ntre esos aquellos objetos faltara algo o alguien más o la sensación de que aquellos objetos nos tienen mucho más que revelar, un excelente escrito que me ha encantado y que quisiera quizás un segunda historia
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tus palabras, María.
EliminarQuizá lo que veas o presientas no sea otra cosa que los objetos marcados de recuerdos que son totalmente ajenos a la protagonista pero que no puede hacerse fría ante ellos. La remueven por algo pero no sabemos el por qué...
Un beso :-)
Me encantó. yo hubiera llorado por los dos ojos, sin distinguir pero en abundancia, calma. me da la impresion que no son objetos de la protagonista, sino de alguien muy querido, quizas la madre. y que no son objetos significativos en la vida de esa persona, sino que son los que quedaron en esa caja cuando se fue. perp igual solo es mi impresion...
ResponderEliminarCom haces sentir...
gracias. besos, Nag
Llevas razón, Gabi. No son de ella pero le han llegado pero, creo, sin temor a equivocarme que no son de la familia, en cambio, esos objetos, por lo que sea, afloran algo en ella que no puede controlar.
EliminarTu impresión en la correcta. Enhorabuena.
Un beso y mil gracias por lo que me dices.
Nostálgicas imágenes que traen recuerdos que fueron y serán. Objetos que traen en aquella lágrima un brillo esperanzador.
ResponderEliminarHermoso relato, un abrazo amiga Mag
Al menos, Jorge, un sentimiento de vida aunque sea ausente, late.
EliminarMil gracias por tu comentario y disfruta de lo que queda de domingo.
Un beso grande.
Hola, Mag!
ResponderEliminarUn hermoso texto que habla de objetos plasmados en la memoria a través del tiempo, recuerdan lugares que saben a desdicha o a refugios de nostalgia. Muy bonito y encantadora reminiscencia.
Que tengas un bello fin de semana
Abrazo
Mil gracias, Yessy. Siempre hay cosas que, por lo que sea, bien porque nos son o bien porque siendo ajenos, nos pillan en el momento adecuado o inadecuado, producen en nosotros algo que no sabemos expresa.
EliminarUn beso grande:-)
Me ha chiflado, objetos que son más que eso, evocan, nos hacen sentir. Ese estilo tuyo me sigue fascinando.
ResponderEliminarUn saludo
Muchísimas gracias, Víctor. Tú que siempre escribes historias curiosas que me impactan de algún modo, que me digas eso, me halaga :-)
EliminarUn beso.
Recuerdos, tantos como objetos, o más. Precioso cuento ese que guía tu mano una pluma fantástica. Gracias por participar.
ResponderEliminarGracias a ti, Alfredo. Un placer haber podido participar.
EliminarY gracias también por lo que dices.
Un beso y nos vamos leyendo.
Qué preciosidad de objetos, con esa lágrima de tristeza rodando por la mejilla izquierda... Eso es lo que tienen los recuerdos.
ResponderEliminarUn besazo, preciosa.
Una lágrima, Dafne, que no sabe bien por qué ni de qué pero que la ha tocado.
EliminarMuchísimas gracias por lo que dices, Dafne.
Un beso grande.