El sol juega a colarse por entre las copas de los pinos. Lo angosto de la carretera siempre me ha hecho pensar en esas películas de miedo en una noche donde el camino parece cerrarse en vez de abrirse e, incluso, en algunos tramos se teñía de rojo. El olor a naturaleza casi ahoga mis pulmones. El zumbido del coche al pasar junto a los pinos y mojones parece el silbido de flechas que, imaginariamente, podrían salir de la maleza.
Cómo cambia el paisaje en unos pocos kilómetros. Atrás habíamos dejado la capital de la comarca, su soberbia fortaleza de forma pentagonal diseñada por Tiburco Sapanochh, su catedral del primer románico español en honor a san Pedro, y sus lacitos o sus condes..., dulces manjares... y el bullicio de una ciudad pequeña invadida por turistas.
Cómo cambia el paisaje en unos pocos kilómetros. Atrás habíamos dejado la capital de la comarca, su soberbia fortaleza de forma pentagonal diseñada por Tiburco Sapanochh, su catedral del primer románico español en honor a san Pedro, y sus lacitos o sus condes..., dulces manjares... y el bullicio de una ciudad pequeña invadida por turistas.
Tras más de una curva llegamos al tupido bosque de hayas, pinos, avellanos, abetos y acebos que rodean la verde explanada de san Indalencio en la que emerge el Monasterio Nuevo, del s. XVII. Aparcamos el coche, cogemos las cosas y nos damos un paseo por los alrededores. Impresiona la soledad del Monasterio erigido sobre la gran montaña de roca que no se aprecia desde ahí. Ya hay gente ocupando las mesas que rodean la pradera y los niños juegan al fútbol o a tirar piedras a la charca que parece un lago.
Decidimos bajar andando por el bosque y paseaderos hasta la parte del Monasterio Viejo o Real Monasterio. El paisaje corta el aliento... y el camino no se hace demasiado complicado. Inunda el silencio solo roto por los pájaros, los grillos y el murmullo de la gente. Seguimos el descenso de la montaña. Llegamos ante la impresionante imagen que supone la gran roca que ampara al aislado Monasterio. Ambos se mimetizan de tal forma que forman uno. Y tan relevante como la roca, los claustros románicos de hermosísimos capiteles. Me imagino el descanso contemplativo de los peregrinos que años ha, hacían el Camino de Santiago. Lo recorremos por su lateral derecho hasta la puerta de la iglesia que se encaja en la roca. El corazón palpita fuerte al ver el imponente peñasco simulando una gran bola a punto de estallar. Y se siente algo especial cuando al entrar en la pequeña iglesia ves la réplica del Santo Grial que san Lorenzo escondió por orden papal y por lo que le costó el martirio de morir quemado en la parrilla.
La historia y las leyendas son ricas en este lugar legendario de la Edad Media, plenamente vinculado a la existencia de la copa, siendo panteón de reyes hasta el s. XII , o personajes de la época, amén de que fue el primer lugar de la Península en el que se introdujo el rito litúrgico romano... y cuna del Reino en el que vivo.
Al salir estábamos cansados, con mil y una sensaciones y un hambre canino, así que nos volvimos arriba, eso sí, esta vez cogimos el autobús turístico.
Extendimos nuestras cosas y nos sentamos a la sombra para comer.
La historia y las leyendas son ricas en este lugar legendario de la Edad Media, plenamente vinculado a la existencia de la copa, siendo panteón de reyes hasta el s. XII , o personajes de la época, amén de que fue el primer lugar de la Península en el que se introdujo el rito litúrgico romano... y cuna del Reino en el que vivo.
Al salir estábamos cansados, con mil y una sensaciones y un hambre canino, así que nos volvimos arriba, eso sí, esta vez cogimos el autobús turístico.
Extendimos nuestras cosas y nos sentamos a la sombra para comer.
Este
jueves, Alfredo nos lleva a jugar a las
adivinanzas
en “La plaza del Diamante”.
Seguro
que el mío lo habéis adivinado.
Os lo he puesto demasiado fácil y seguro que habéis hecho trampas.
Os lo he puesto demasiado fácil y seguro que habéis hecho trampas.
Imagino donde estás, y recreo el paisaje mientras leo y tanta historia en esos parajes. Un original viaje has creado.
ResponderEliminarBeso dulce Magda.
Es una excursión familiar en un paraje precioso, alejado de todo y que no está lejos de dónde vivo.
EliminarUn beso.
Se donde estas y te envidio, un lugar para perderse y disfrutar de lo mucho que ofrece. La peña impresiona. Un abrazuco
ResponderEliminarLa verdad es que vaya idea hacer el monasterio bajo la peña pero era la forma de permanecer aislados y protegidos.
EliminarUn beso enorme :-)
Desconozco totalmente el lugar y no me sorprende ya que nunca he estado en España, pero sí te digo que por lo que muestran las fotos, se trata de un sitio que bien merece recorrerse. Muy mágico y bien conservado. Un abrazo
ResponderEliminarEs una belleza de lugar, Neo. Algún día, quién sabe, igual lo puedes visitar y te gustará. Estoy segura. Es el Monasterio de San Juan de la Peña. Una maravilla.
EliminarUn besito.
Es uno de nuestros destinos a visitar… Estas vacaciones estuvimos por Segovia y Burgos… La verdad es que nos maravilló… Y del lugar que nos muestras, nos han hablado maravillas ;-)
ResponderEliminarQué buen recorrido con tus siempre bellas letras y con tan preciosas imágenes, Mag…
Bsoss enormes!! ♥
No olvides anotarlo en la agenda. En verano, un día al aire libre. En invierno una escapada rápida pues como haya nevado mal pero es un lugar con mucho magnetismo.
EliminarUn beso muy grande.
Has descrito lo que se siente cuando uno se mimetiza con la naturaleza, yo, devoradora de km con mi mochila y mi música, me adentro en los parajes e intento ir para atrás en el tiempo. Y sentir lo que tú tan bellamente has dibujado con tus letras.
ResponderEliminarGracias por invitarme a este viaje, Mag.
Mil besitos, preciosa.
Ahora solo has de verlo un día y disfrutarlo todavía más.
EliminarUn besi muy grande :-)
El primero puede ser el palacio de la Alfageria y el segundo el monasterio de Piedra, ambos en Zaragoza.
ResponderEliminarPreciosa descripción y precioso lugar.
Un abrazo
Casi... casi, Carmen. Se trata de Aragón, cierto, pero algo más arriba, en pleno Pirineo, en la comarca de la Jacetania, entre Jaca y Santa Cruz de la Serós. Es el Monasterio de San Juan de la Peña. El primero es el nuevo que ahora es una hospedería, un centro de interpretación de la naturaleza.... Y el otro es el viejo o Real. Por esa peña se llama así. Un paraje maravilloso.
EliminarTe lo recomiendo si una vez decides venir por estas tierras.
Un besito muy grande.
Me parece maravillosamente descrita la excursión a San Juan de la peña, lugar tan fascinante como cuentas. El punto de partida debe ser Jaca y, entre interrogaciones digo que la foto corresponde a la Ciudadela.
ResponderEliminarMe has producido añoranza de mis años aragoneses en los que solo fui al monasterio una vez. Creo que debo repetir ya mismo.
Muchos besos.
Lo has acertado pero todas las imágenes son de San Juan de la Pena, aunque sí describo la ciudadela en la primera parte, como dices, el punto de partida :-)
EliminarNada, has de repetir un día. Además, puedes alojarte ahí, en el Monasterio Nuevo que es una hospedería "de lujo". Despertar, abrir la ventana y ver esas montañas... no tiene precio.
Un besazo enorme.
He hecho trampas y ya sé que se trata del Monasterio Nuevo y el Monasterio de San Juan de la Peña, en la provincia de Huesca.
ResponderEliminarQué tramposa soy pero gracias a ti me he interesado por este lugar y estoy deseando visitarlo.
Un beso.
Jajajajaja No se lo diré a nadie Sshhhhh :-)
EliminarEs muy bonito y para ir con niños es genial. Pasar ahí el día. Pasear por los bosques, que jueguen en la explanada... conocer la cuna del Reino de Aragón y ver el Panteón Real, disfrutar de los paisajes en los miradores... Vamos, que vengas :-)
Un beso enorme.
No he estado nunca en el lugar que describes, pero yo que prefiero perderme en medio de la naturaleza, he podido percivir a traves de tu escrito olores y otras sensaciones. Maravilloso relato, besos.
ResponderEliminarAquí te esperamos, San Juan de la Peña y yo... Jaca es una ciudad pequeña con mucha vida y tienes las pistas de esquí a dos pasos que en verano está muy bien para pasear. San Juan, ¿qué te voy a decir? Como ya he comentado está muy bien para pasar un día de campo. Tiene merenderos y se llega en coche perfectamente. Luego ya es andar y disfrutar de la naturaleza y si no se atreve uno a bajar andando, porque hay un trozo, pues en autobús que te evita el sofocón.
EliminarUn besazo, Molí.
No tengo la menor idea donde estás, aunque los demás lo sepan. Pero es notablemente turistico, según las fotos y lo que describís.
ResponderEliminarUn abrazo.
Haz trampas pero te lo digo, San Juan de la Peña, un entorno muy bello cerca de donde vivo. Un día que no sepas dónde ir, piérdete por estas tierras oscenses. Es un mundo lleno de magia.
EliminarUn beso, Demi.
Hola Mag: has dadp en el clavo: has conseguido que nadie lo conozaca. Pero no es de extrañar. No sé si quieren preservar el sitio del turismo de masas.
Eliminarporqué bonito es y muy intersante. Saludos amiga.
Aquí es muy conocido y la zona igual, desde hace muchos años. Pero es lamentable que sitios que merecen mucho la pena, y es opinión personal, ahora los sacan por televisión, y todo se degenera.
EliminarAquí había antes, y siguen estando, unas gorgas que solo las conocían los del pueblo donde están y cuatro gatos. Ahora, han prohibido hasta el baño de la masificación que hay.
Salto de Bierge se llama.
Besitos muy grandes, Montse.
Creo que es El Monasterio de San Juan de la Peña, cerca de Jaca.
ResponderEliminarYa me dirás.
Crees... Crees y muy bien :-)
EliminarAhí está, a dos paso de Jaca, si señora.
Un besito.
La descripción que haces es muy buena e invita a visitar el lugar que se ve precioso también en las fotografías. La verdad es que he hecho trampa y he buscado en internet con las pistas que has dado, para saber que se trata del Monasterio de San Juan de la Peña en Jaca. Por desgracia no lo conozco pero aún estoy a tiempo de hacerlo. Luego ya he visto los comentarios...claro.
ResponderEliminarUn beso
Muchísimas gracias. No creo que se caiga después de tantos siglos y es muy hermoso. Es un lugar que tiene mucho que ver alrededor y está muy cerquita de Jaca, donde también se puede pasar un día estupendo.
EliminarTrampas... , ¿qué trampas?
Besos enormes.
Tampoco conozco el monasterio, pero esa foto que lo muestra bajo el peñasco me parece sencillamente increíble y hermoso. Los colores de la piedra y sus sombras me resultan muy atractivas.
ResponderEliminarBuena propuesta Mag, excelente tu participacion
Abrazo
El nuevo es muy sencillo aunque impresiona su tamaño. No parece tener final pero sí, el viejo es impresionante. Rezuma historia y vida a pesar de los siglos. La fuerza de la roca traspasa.
EliminarUn beso muy grande.
Un lugar precioso para encontrarse con uno mismo, para disfrutar del arte y del entorno, me encanta el arte y la naturaleza
ResponderEliminartodo lo que lo rodea, preciosas fotos y precioso texto Mag
Besos dulces y feliz finde
Entonces, estoy segura de que te encantaría este lugar. Sus olores, sus colores en otoño... todo esos matices...
EliminarOjalá puedas visitarlo algún día.
Un beso muy grande.
Hola Mag, gracias por participar en esta propuesta tan caprichosa. No he leído los comentarios anteriores para no conocer la respuesta a tu «Adivinanza...» La trampa me ha permitido recorrer metro a metro la zona: El Nuevo y el Viejo (impresionante) Un recorrido a golpe de ratón desde Jaca hasta el patio interior del Monasterio, no sin antes darme un paseo por los alrededores. De nuevo gracias por acudir a mi convocatoria. Besos.
ResponderEliminarEstuve a punto de poner un enlace pero dije con las fotos será suficiente :-) Lo cierto es que es un lugar sumamente místico y todas las montañas que lo rodean, sus miradores y, como he dicho, ese misticismo que brota de sus piedras.
EliminarUn beso enorme y la verdad es que esta convocatoria, sin menos preciar ninguna, me ha parecido genial, curiosa, divertida... Me ha encantado.
Al igual que Charo, yo también he hecho trampas y por eso sé que se trata de San Juan de la Peña. Me quedan tantos lugares por descubrir, por disfrutar que me asusta tener tan poco tiempo. Gracias por mostrarme esta belleza.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una trampilla no es nada :-)
EliminarComo he dicho antes, hay tiempo para todo y seguro que alguno de esos sitios que te gustaría ver, lo verás. Todos te están esperando.
Un beso muy grande.
Como siempre..o al menos como es habitual en estos dias...llego tardisimo...pero trato de leer todas las entradas para saber lo que se les ocurrio a cada uno..lo bueno de llegar tarde es que no me romperè la cabeza adivinando porque ya lo dijeron, pero si me deleitare viendo esas magnificas fotos..bersossss
ResponderEliminarSúbete al carro que yo voy así... Y no sé es falta de tiempo o que se me amontona la faena :-)
EliminarUn placer tenerte por aquí cuando vengas, cuando puedas.
Un besito muy grande y espero estés bien.