Tus palabras resuenan en mi interior
como el sabor de este beso,
como el aroma de este abrazo
que me une a ti y te enclava a mí,
como el eco reverberado de todos nuestros silentes tallados en miradas…
Y eres ánima de mi ánima,
argumento no vano de todos mis pensamientos,
pasión ejercida de mi piel engarzada en tu piel,
cuerpos encarnados en el deseo
impaciente
y vibrado de dos fuegos encontrados.
En Nosotros, Nos.
En Nosotros, Nos.
Tus ojos son mis ojos; mi boca, tu boca; mi latido, tu latido…
Tu voz, palpitos de lluvias en los amarres de mis puertos.
Tu voz, palpitos de lluvias en los amarres de mis puertos.
Mi esencia, la perfecta conjugación de la tuya…
Tú, mí guía. Yo, tu cauce.
Tú, mí guía. Yo, tu cauce.
Somos elementos etéreos,
fraguados una y otra vez
en sangre y carne,
paja y barro.
Semillas de Arena y Agua,
Viento y Sal.
Vibratorio poema que se riza en la mirada, toma imagen la palabra y una danza etérea se apodera de dos almas en llamas.
ResponderEliminarMe encantó leerte hoy, Mag.
Mil besitos, preciosa.
Tú en él, él en ti, dos cuerpos y dos almas latiendo desde el fluir de la sangre que circula por las venas hasta la misma piel... vosotros... vos... unidos... conjugados... amados... Vida de la misma vida.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Que versos tan inspirados. Las palabras han sido semillas de emociones y las emociones, sensaciones han sido semillas de tus versos.
ResponderEliminarBesos.
El complemento, la respuesta, el reflejo, lo recíproco que crea la unión.
ResponderEliminarBeso dulce Magda y dulce semana.
Ser uno en el otro, aun con los ojos cerrados como tu fotografia
ResponderEliminarBesos dulces Magda, feliz semana
Vinculados cual simiente que florece en esa conjunción de vuestros cuerpos y vuestras almas… Ese maravilloso y bendito ser que ES, vive y siente en el otro…
ResponderEliminarPrecioso, Mag…
Bsoss y cariños, y muy feliz semana ♥
Mil gracias a tod@s por vuestros comentarios y cariños. Para mí es increíble sentir vuestras palabras como caricias que me abrazan.
ResponderEliminarMil besos y mi gratitud siempe.