8 de septiembre de 2016

Tatuados en los sueños...

El sol dibujaba arabescos al colarse por los grandes ventanales y una suave brisa del desierto despeinaba mis velos, ondeándolos. Mientras mis pasos avanzaban, mi silueta se veía reflejada en el lago de aguamarinas que era el suelo de mármol.

Con decisión, seguridad y ni vista atrás, avanzaba hacia la gran puerta dorada abierta de par en par, y más cerca estaba de ella, mis vestiduras se iban haciendo más ligeras, mientras en mi mente, como si fuera una música recordatorio, escuchaba mi nombre... pero otro nombre… en una voz suave, ligera y al tiempo profunda y musical…

El astro parecía ser diferente. Los sonidos sonaban distintos. El viento era desemejante, y mi piel se iba tibiando entre las sombras de la galería exterior. El agua discurría calma en las fuentes que quedaban a mi derecha  y el vergel desprendía un frescor que se agradecía.

Mis ropas se iban desprendiendo como capas innecesarias, al tiempo que atravesaba los arcos de la galería, uno tras otro, hasta que mi cuerpo quedó sutilmente vestido, o desvestido, con una simple túnica de color crudo, de tejido suave, semitransparente, y mi cabello se mecía libre, a merced del viento que desde el desierto arrancaba silbidos a las palmeras.


Aquella voz seguía sonando en mi interior, haciendo palpitar mi corazón, aligerando mi alma y deteniendo mis pasos unos metros más allá, en la fuente azul, donde los peces de colores eran dueños y las libélulas azules revoloteaban. 
Ahí estaba ese hombre. él: Sentado al borde, con los pies metidos en el agua, jugando con esta entre los dedos de sus manos. El sol se reflejaba en ella produciendo un efecto áureo en torno a su figura, vestida de crudo... como la mía.
Me miró. Sonrió. Escuché su llamada sin pronunciar palabra alguna, silente, un rumor en una lengua que no era la mía pero que era capaz de comprender como quien comprende a una madre.

Mis pasos dubitativos le alcanzaron. Tendió la mano y, al tomarla, me guió para sentarme a su diestra. Tomó agua en su mano libre y, a modo de bendición, la derramó sobre mi mano, retenida dulcemente en la suya.

Mayim chayyim... (1)

Su mirada, afín a un topacio amarillo, se clavó en la mía y me sentí ligera, en una envolvente sensación de ser acogida en su seno, de sentir latidos que se acompasaban como toques de riq a las danzas de  unos pies desnudos…
Sus ojos dibujaron una sonrisa; y su boca, el sonido de mi otro Nombre… 

Ishti... Ve'ahavat olam ahavtich... (2)

Y entonces, supe que ya habíamos orado sobre las arenas... y que el agua había sido arena y sal.



(1) Agua viva.
(2) Esposa mía... Te he amado con amor eterno...
Ni siquiera sé si está bien escrito. En realidad, solo recuerdo cómo lo entendí y cómo debía interpretarlo.

***   ***   ***   ***   ***   ***
Este jueves, Maribeldesde su blog “Soliluna”, 
nos evoca a regalar un sueño.
Este es el mío.

22 comentarios:

  1. Tu cabello meciendo como el viento y tu corazón latiendo como una danza.

    Qué tierno y sublime es tu relato juevero, eres una caja de sorpresas, te admiro, Mag, Reina de las letras.

    Un placer leerte.

    Un besazo.

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  2. Ha sido como un viaje, suave, de terciopelo, una maravilla...
    Besos :)

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  3. Sabía por donde iba ir tu sueño, lo sospechaba. Aun así me sorprendió, como describiste ese ambiente tan propicio, las ropas que se fueron haciendo más sutiles. Y ese encuentro. Uno más de tantos a través del tiempo.
    Muy bien escrito.
    Besos.

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  4. Un escrito genial, una colaboración explosiva. Sutileza y poesía juntas. Me ha encantado, espero que hayáis disfrutado tanto haciéndola como yo leyendo.

    Besos.

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  5. Yo iba a tu lado, sin lugar a dudas, o me senté en primera fila, pero así te vi y así os vi.
    Haces que entremos en la escena, Mag.
    Precioso... Como tú.

    Mil besitos.

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  6. Que dulzura y relax sumergirse en ese, tu sueño mmmmmmmm.
    Un beso de luz

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  7. Pocas veces he logrado soñar con esa intensidad de sensaciones y nitidez de sensaciones. Envidiable!
    =)
    Gracias por compartir tu mágico sueño!!

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  8. Tengo que decir, que consigues crear un hermoso halo que te envuelve y te lleva al ritmo de las caricias de tus letras, suaves, cual tul… Se conjugan emociones en ese maravilloso baile al que nos invitas… Una verdadera obra, mi querida, Mag…

    Bsoss enormes!! ♥

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  9. Es un sueño maravilloso. El leerlo me ha relajado de una manera bestial. Hasta he podido sentir el aire a libertad que desprende. Me ha encantado. Es un buen presagio soñar con agua y viento suave.

    Saludos cordiales

    Maribel

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  10. Tus sueños son para sentirlos con los cinco sentidos.

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  11. Me he sentido cómoda en tu sueño, es como si hubiera podido sentirlo desde una esquina, dibijas el sentir con maestría. Precioso sueño. Abrazos

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  12. Un sueño maravilloso amiga Mag. Me lo has hecho vivir, con lo bien descrito que está, con tantos pormenores y detalles. Un cuadro perfecto. Genial!!! Saludos!

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  13. No siempre los sueños se presentan tan nítidos, o al menos no siempre permanecen en la memoria con tanto detalles. Si el tuyo fue así has logrado plasmar ese ambiente onírico de surrealismo. El significado quedará por ser descubierto.

    Beso dulce Magda.

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  14. Maga, nos has compartido un sueño que a mí, particularmente me transmitió paz.
    Es precioso, mi Azul...

    Besicos!!!!

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  15. ¿Sueño? ¿Ficción?. Ni lo sé ni me importa. Solo decirte que no se puede escribir mejor. Has conseguido, con tu poético relato, enredarme en tus deseos y padecer porque las palabras se acaban.
    Enhorabuena.
    Un beso.

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  16. Precioso sueño y preciosa prosa poética, describiendo ese amor para siempre.
    Un abrazo

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  17. Qué maravillosa forma de escribir. Es un sueño tan bello que es una pena despertar.
    Un beso.

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  18. Que sueño más dulce, mágico y tranquilo, aun puedo sentir correr el agua y el viento suave. Me encanta como lo describes, besos.

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  19. Hss dibujado un escenario onírico de una belleza sin igual y nos has sumergido en él de la mano de tu protagonista. Se respira serenidad, entrega, confianza, sutileza. No quisiera despertar de un sueño así para prolongarlo lo más posible.
    Un abrazo.

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  20. Qué felicidad, qué paz y qué amor se respira en tu sueño! Lo has recreado tan bien que me ha parecido estar allí, al lado de la fuente azul con los peces de colores.
    Cómo me gustaría tener un sueño así...
    Un beso

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  21. Un sueño muy bien relatado y que resulta muy gratificante, una experiencia que debería ser real.
    Muchos besos.

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  22. Mil gracias a todos y a todas por vuestras palabras.
    Deciros que mis sueños también son menos bonitos pero son muy nítidos y todos tienen claves que hay que entresacar. A veces cuesta más pero siempre, siempre, me ponen en pista de algo.
    Mis íntimos saben que recuerdo los sueños incluso los soñados hace años y que suelo recordarlos hasta en el más mínimo detalle.
    A veces son místicos, otras veces son raros, raros, ratos... pero siempre son dignos de pensarlos.

    Besos enormes y reitero mi gratitud por vuestro tiempo y comentarios.

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Sueña porque soñar es vivir y vivir es sentir...