zarzal de sarmientos y espinas,
nido de rosas con pétalos engarzados
y esquejes de aguacero.
Sekiná.
Sekiná.
Aguacero de mis ojos,
cristales líquidos,
salinos y de transparente Esencia.
Cuentas de rosario con tu nombre,
en el sino de mis manos.
Colmado de vacíos plenos
los cálices sangrados y yermos
de esas caricias que penden en zalema.
Palabras mudas.
Quejidos quedos.
Lamentos ignotos.
Aves de espuma púrpura
en mi boca gozan como ángeles caídos
liberados del abismo al Silencio.
Agujas de estigmas
cosen desvelos y vigilias,
lauros y venturas
lauros y venturas
en penitencia carnal.
Copulan
Tu Ánima,
mi Animus.
¡Ángelus!
Tu Ánima,
mi Animus.
¡Ángelus!
Alzo mi voz callada
y en mí se hace Voluntad de Ti.
Tuya.
Tu faz. Tu Iqar.
Sierva, Hija, Reina.
Ousía de Tu Carne y Tu Espíritu.
Tu Gloria.
Sekiná.
Tu Gloria.
Sekiná.
La plenitud llameante de la que emana el alma humana. principio divino y realidad satisfecha, manifestaciones generadoras del mundo. Sin suspiros con seguridad. Abrazos manifestados
ResponderEliminarEster, un placer saberte aquí.
EliminarLa plenitud de la entrega. Oración de alma. Permiso consentido.
Eso es: el mando de la gloria.
Un besazo.
En verdad eres Reina y toda una Señora, con la voz de lo más erótica en poesía, magistral, chapó, Mag, un placer leerte.
ResponderEliminarCada vez a tu blog, últimamente te lo digo, es que me parece encontrar cambios en tu blog, pero como te he dicho en otras ocasiones, no me hagas caso, tal vez sea que a mí me lo parezca.
Besazo.
Ser Sekiná no es cualquier cosas. Es un don, realmente.Aunque aquí cabría relacionarlo más con la Sophia pero me gustó esta variante.
EliminarLo del blog, como te comenté en otros comentarios, sigue igual que antes, tal vez la tonada de las imágenes.
Un beso y un placer.
Un cuerpo en que germinan emociones, sensaciones, que pueden desarrollarse, para conectar carne y espiritu,
ResponderEliminarBesos con admiración.
Así es, Demi, es lo sublime del alma.
EliminarUna conexión del Ánima y el Animus. Un amor y una unión intrínseca.
Un beso enorme, guapo.
Un cuerpo que siente puede ser la más glorificada ofrenda desde la profundidad del ser. Gran poema y bonitas imágenes.
ResponderEliminarBeso dulce Magda.
Muchísimas gracias, Dulce.
EliminarEs una entrega desde lo más profundo del alma, con toda la Pasión... aunque eso suponga o engendre un dolor infinito.
Un beso enorme.
Tu Rosa... la Suya. Una entrega en cuerpo y alma, infinita y eterna, sentida y vivida.
ResponderEliminarMaravillosas letras Mag, con luz.
Besisssssss hermosa.
Como la Pasión es luz y Vida...eso intento llevar en mis plegarias :-)
EliminarUn beso muy grande :-)
Y he ahí la morada de todos y cada uno de los sentires… Ésos que dicen de la piel y del alma, esa voz que palpita y gime por cada recoveco, que exuda por cada poro lo que se es y se siente, por y para él; su gloria…
ResponderEliminarMaravilloso, mi querida Mag… Tu hogar en un exquisito templo en el que abrazarse a ese sentir sublime, cual ofrenda a la vida, a la carne y al alma…que se entrega y ama...
Bsoss y cariños enormes ♥
De eso se trata, Gin, de ser la morada de lo que sentimos y anhelamos, de la entrega más plena desde lo más profundo..., desde lo más íntimo de nuestro ser... Ser ese complemento mutuo.
EliminarUn besazo muy grande y mil gracias, también.
No me canso de leer tu poema... es como una oratoria, Mag.
ResponderEliminarComposición nacida cuando todo se concentra en el mismo latido, y desborda cascadas de versos intentos y bellos.
Mil besitos, querida.
Es un conjunto de letras algo diferente a lo que suelo escribir aunque tiene la esencia del Alma plena, de la entrega y devoción más allá de la carne. Es el reencuentro con el Animus.
EliminarUn beso grande :-)
buena exaltación. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Xan...
EliminarMil gracias por tus palabras y un abrazo.
Fantástica, no podía esperarse menos.
ResponderEliminarGracias, Rey, por pasarte y dejarme tu tiempo y tus palabras.
EliminarUn beso grande.