La palabra prohibida
El silencio me sobrecogió y una sensación extraña me invadió. Atravesé uno de los pasillos laterales escuchando el sonido vacío de mis pasos entremezclado con el ulular de un viento inexistente. Vinieron a mi mente aquel puñado de pequeños recuerdos que hicieron perdiera mi mirada en el hueco de aquella capilla. Mi piel se erizó y percibí un susurro brusco a la altura de mi hombro. A veces la mente traiciona. Paralizada, dejé de respirar como si eso pudiera facilitarme la escucha. Nada. Nadie. Solo un Cristo sin cruz y una virgen inmaculada con rosario y escapulario. Ninguna de las dos cosas debía ir con aquella virgen. Y Marcos, con el león a sus pies, observándome como si tuviera algo que decirme. Extraña aquella conjunción.
Mis pies iban en una dirección, mi cabeza en otro y entre los tres, no pude hacer movimiento alguno. Estaba entelerida y no era precisamente por el frío que, hacerlo lo hacía, aunque no debiera. Un nudo grueso atenazó mi garganta. Casi no podía respirar y unas inmensas ganas de gritar me amenazaron pero quedó en eso, en amenaza, porque si mi cuerpo no podía reaccionar, mi voz tampoco podía salir. El corazón me iba muy rápido y podía ver la condensación de mi aliento en la penumbra del espacio.
No recuerdo más. Cuando desperté estaba atada a una cama en una habitación cuyas paredes debieron ser blancas en alguna ocasión. En la pared de enfrente, una cruz sin Cristo y san Marcos parecía haber dejado la hornacina para quedarse a los pies de mi cama. Aquella convulsa sensación volvió a torturarme y mi mente jugaba, torpemente, a revelarse mientras mi cuerpo, más inerte que otra cosa, no luchaba por zafarse de sus ataduras. Juro que lucho cada día pero en mi vida hay un espacio en blanco o uno profundamente negro que no logro componer. Y, aquella primera emoción, aquel desagradable sentimiento, ahora se tornan en otra cosa que venceré con la misma arma que me trajo aquí...
Este es mi aporte (334 palabras) para la convocatoria de este jueves. Picando en la imagen podéis ir tanto a ella como al listado de participantes.
Pueden darse dos palabras prohibidas pero una está por encima de la otra. Cualquiera de ambas son válidas. Y también puede haber dos escenarios o ser uno metido en el otro... No os dejéis llevar por el título.
De primera podría ser ese manicomio del siglo XIX, entre esos muros alguien entró sin pensar que lo que la esperaba era su propio ingreso. Un poco de terror nos has metido en el cuerpo. Tal vez fuera en busca de algo o alguien.
ResponderEliminarUn besazo y sin mucho ruido cierro la puerta no sea que me quede dentro ajajjaja. Feliz jueves Mag.
El escenario a mi, de los posibles, me parece el manicomio.
ResponderEliminarPero con la palabra prohibida me has pillado. Angustia, por lo que siente la protagonista.
Besos.
Todo fuera de lugar. Las imágenes sin corresponderse con lo que eran. Un relato escalofriante de ultratumba, en una ambientación de psiquiátrico.
ResponderEliminarTal vez, como dice Campirela,la palabra sea manicomio. O tal vez ,locura.
Beso grande, Mag.
Perfectamente escenificado, interpretado y relatado. Yo me quedo con todas las emociones que has ido desgranando, la situación y el momento intenso de quietud escénica y zozobra mental. Me ha encantado, mi querida Mag. Admirable.
ResponderEliminarMil besitos llenos de cariño y admiración ♥
Inquietante relato, locura, posesión, son los conceptos que veo en en tu febril relato. Excelente como siempre.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Hola Mag, un relato muy bueno que tiene de todo un poco
ResponderEliminarPuede ser que antaño fuera un manicomio o un santuario religioso como una iglesia. Pero lo que yo me pregunto es como a ido a parar la protagonista a un lugar como ese.
Te deseo una feliz tarde, besos de flor.
Esa alucinación debería haberle llevado a un manicomio, pero el narrador se esfurza por retomar las coordenadas de su vida. Tan loco no está.
ResponderEliminarUn abrazo, y por ese san Marcos, salido de la hornacina :-)
Un relato que conmueve, me hizo recordar situaciones que también pasan en los hospitales, cuando están con esos goteros, esas medicaciones tan sedantes, donde deliran...
ResponderEliminarAunque yo creo es el manicomio, me removió por dentro.
Nada que ver con esto pero si el como se tiene que sentir alguien así.
Besos enormes Mag y bello día preciosa
Los sentidos pueden cambiar con el paso del tiempo y la mente tiende a protegernos de recuerdos traumáticos, aunque nuestro cuerpo reaccione de otra manera.
ResponderEliminarLocura, puede ser mi palabra.
Un placer leerte siempre
Besos
Quedé inquieto con este relato... la capilla, el pasillo, esa cruz sin cristo, en mi caso al revés.
ResponderEliminarHabía un cristo sin cruz, y una virgen quebrada, le faltaba el rosario, como si alguien le hubiese cercenado los dedos.
Siempre hay un espacio en blanco que en la realidad es negro y oscuro.
Saldrás de todo si quieres, yo prefiero este silencio. Así nadie me juzga... si pasas por la cuarta puerta , no entres... puede ser la mía.
Dicen que hay locos que se comen las uñas, pues creo que la virgen también.
Porque no había una cruz detrás del cristo?... un día decide liberar al cristos castigador. Pensé que si el no estuviera crucificado, no me castigaría.
Los pasillos del sanatorio, acostumbran a devolver las voces.
A ver, se me ocurren dos, MUERTE o LOCURA. Ambas igual de terribles si se llega a ellas sin haberlas buscado. Has propuesto un juego muy interesante para este jueves, Mag y exitoso, dado el numero de participantes que ya hay en la lista. Un abrazo
ResponderEliminarpues aquí estamos todos, pensando en un manicomio, de esos en los que te metían sin preguntar, porque hacías cosas raras, o no te habías casado a ciertas edades, ya sabes ;)
ResponderEliminarParece más bien un manicomio que una iglesia. La palabra puede ser escapar? Me quedo intrigada. Besos.
ResponderEliminarSedantes o alucinógenos porque no hay negro sin blanco. Un abrazo
ResponderEliminarUfff... que difícil lo has puesto. Yo diría hospital y capilla del hospital.
ResponderEliminarY la palabra paranoya, o alucinación religiosa ( no sè si tiene slgun nombre concreto. Creo que lo vi en una peli hace mucho.
Pero esto es muy difícil eh? No creo que haya acertado
Besosss Mag y gracias
Muy emocionante tu relato, Mag, pero difícil de descifrar. Por cierto que me encanta la imagen de la mujer con la mariposa monarca, hace algunos meses cuando corría por el bosque me encontré con un arbusto lleno de ellas. Bueno, dos palabras voy a dar y no digo el porqué, tú ya nos dirás:) La primera "Translatio" y la segunda relacionada con ella es "Alma".
ResponderEliminarBesos.
me has hecho recordar esas pesadillas en las que intentas gritar, pero no te sale la voz... esa una sensación muy angustiosa.
ResponderEliminaren las antiguas instituciones mentales, supongo que con los pacientes que dieran algún problema no tenían muchas contemplaciones, se les ataba y ya está. ahora quizá se trabaje más la terapia...
muy buena la convocatoria y tu contribución. besos!! :*
El texto es inquietante, pero las palabras prohibidas no logro sacarlas. El escenario puede ser la iglesia y el manicomio. Me intriga que será!
ResponderEliminarUn beso
A veces tildamos de locura o alucinación a aquello a lo que no sabemos dar una explicación coherente, dentro de nuestros conocimientos. A mí me sugiere varias cosas; quizás otro plano, otra vida, e incluso un viaje astral… No doy con la palabra o palabras exactas, pero, en cualquier caso, es un texto verdaderamente magnífico, no solo en su contenido, que te envuelve en un misterioso e inquietante halo, sino también en su estructura: una narración impecable.
ResponderEliminarFelicitaciones por tu aportación, mi querida Mag.
Un verdadero placer…
Abrazos y cariños, y muy feliz finde 💙
PAVOR y ESQUIZOFRENIA son las dos palabras que me vienen al leer tu extraordinario texto que conmueve hasta la última fibra. Noto un deseo de superación muy fuerte en la protagonista que espero logre componer los pedazos rotos de su alma y ese blanco u oscuridad que aun no. El lugar donde despierta es, para mi, un Sanatorio, aunque en la pesadilla se encuentra en una capilla de una Iglesia, supongo.
ResponderEliminarLa descripción de las imágenes de culto es muy significativa. Quien sabe, ese Marcos sentado a los pies de su cama podría ser el médico o un otro significativo de carne y hueso. Ella está atada con correas a la cama y no se resiste, cuando lei esa parte pensé en SUMISION. Podría seguir ad infinitum pero paro aquí.
Siempre es una delicia leer tus textos y este juego de tu convocatoria es muy divertido. Gracias por anfitrionarnos este jueves. Beso Enorme y abrazo bien fuerte.
Miedo a lo Desconocido.
ResponderEliminarEse no saber en donde uno se despierta. Ni el porqué ni el como ha llegado hasta allí.
Tiene que ser horrible despertarse en un lugar como ese.
Buen relato, un abrazo.
Un éxtasis místico que la lleva al manicomio... ay! no se... me está encantando leer los relatos de la convocatoria pero reconozco que se me da fatal adivinar jajaja
ResponderEliminarFelicidades por tu relato y por la convocatoria juevera :)
Bss
Me intriga si es algo real o simbólico, que representa los conflictos internos de la protagonista.
ResponderEliminarEnigmático pero bien contado.
Besos.
Bueno, bueno, bueno... La verdad es que habéis ido muy cerca. Todos vuestros argumentos son totalmente válidos. La historia puede derivar por mil sitios pero podríamos concretar que nace en una iglesia y muere en una sala que conoció mejores tiempos, por lo que podemos deducir ese manicomio del s. XIX.
ResponderEliminarLa protagonista no está loca, ni tiene alucinaciones ni padece enfermedad mental alguna solo que la curiosidad y las ganas por conocer algo sobre lo desconocido la ha llevado a una situación límite.
Podemos decir que al principio siente MIEDO porque se encuentra ante hechos y circunstancias que se escapan a su lógica. Hay frases significativas que definen qué es el miedo y las sensaciones que este produce. Es totalmente consciente de la situación pero algo pasa en el medio que ella se pierde y aparece atada... en ese sanatorio o bien en una simple cama de urgencias con un brote psicótico. En fin, que no os lío.
De la curiosidad pasó al miedo y del miedo a la confusión. Empezó en una iglesia y acabó en una sala de... un manicomio o, como os he dicho, en urgencias :-9
Millones de gracias a todos y a todas por jugar conmigo.
Un beso enorme y feliz domingo.
Mag, fíjate a la hora que vengo y ya está todo dicho, menos lo que te voy a decir ahora : que a pesar de ser un texto pavoroso me ha enganchado hasta el final.
ResponderEliminarMe encantó jugar contigo a un juego tan original y literario.
Gracias por tu convocatoria y un fuerte abrazo.
Bufff he perdido el tren, para otra vez cojo el avión, pero bueno, he llegado, aunque ya lo has dicho todo.
ResponderEliminarUn placer haber jugado contigo. Me ha encantado.
Felicitaciones por el éxito de tu convocatoria.
Besos.