Mil cuervos blancos nombraron mi nombre.
Esos mirlos de pico amarillo
como el corazón de las caléndulas
hacen vuelos en raso y seda,
bodoques de silencio preñado de sueños.
Sueños muertos...
Sueños heredados.
Te sigo pensando.
Me sigues latiendo....Silente...
O silencioso.
Abres mi pecho alado,
sediento de otras mil almas que gritan
el sosiego recio de quien te designa...
Incólume...
Ebrio de Luz.
Penitente de sin sombras.
Ahí estás... Así eres.
Tú, mi aleteo de paz.
In memoriam
Deux
1 de abril de 2017
1 de febrero 2018
Una vez más, como siempre, un digno homenaje que además te enaltece.
ResponderEliminarBeso dulce y dulce noche.
Un abrazo enorme, Mag.
ResponderEliminarUn inspirado y sentido homenaje.
ResponderEliminarUn gran beso y un prologado abrazo
Preñado de sueños de cuerpos enredados, tu en mi, yo en ti...
ResponderEliminarMe encanta
Un besazo princesa
Cuando veo que se siguen publicando homenajes siento la alegría de saber que no se olvida a los que han sido importantes para cada uno, el tuyo es precioso. Abrazos
ResponderEliminarHermoso, como siempre, este homenaje que dice y palpita excelso, más allá de espacio y tiempo…
ResponderEliminarUn placer, mi querida amiga…
Bsoss y abrazos enormes.
Muchísimas gracias por acompañarme en estos sentimientos.
ResponderEliminarMi gratitud sincera.
Besos y abrazos.
Desde la filosofía que lleva el lucir una máscara hasta este sentimiento que no deja de bullir de una manera inmensa, el homenaje hace digna a la persona y al protagonista porque de este gesto todo habla.
ResponderEliminarSublime cada entrada mi querida Mag.
Mil besitos y feliz inicio de semana.