25 de noviembre de 2021

Reminiscencias...

Un Jueves, Un Relato 
Pasillos

Quizá aquel pasillo era cuanto quedaba de mi niñez. Su angostura, su profundidad. Las paredes empapeladas de aquel estampado en tonos verdes que recordaban a las celosías árabes  y el suelo de baldosas haciendo dibujos. Aquel silencio al caer la noche y la tenue algarabía de las mediodiadas. Me sonrío al recordar a mi tentetieso de Donald castigado en uno de los rincones porque en uno de sus balanceos había osado darme en la frente. Yo no levantaba más de dos palmos y él, palmo y medio pero ambos apuntábamos formas. En aquel pasillo pasaba la mayor parte del tiempo, cuando no estaba trasteando por otros lares. El sol daba de pleno por una cristalera que se orientaba a unas pequeñas colinas al otro lado de la carretera. Ahora hay otra casa con otro pasillo que la cruza. No hay colinas ni niñez... ni tiempo.


Este es mi aporte (145 palabras) para la convocatoria de Inma desde su "Molí del Canyer" Picando en la imagen podéis ir al listado de pasillos.

18 de noviembre de 2021

Soy lo que Soy...

Un Jueves, Un Relato 
"Ser otro. Cambio de sexo"


Solo he de imaginarme como tiemblan sus nalgas y el vaivén de sus pechos ante mis embistes. Sabe que la domino. La retengo, la suelto... pero está a mi merced… Y su fingida resistencia es la misma que me da fuerza para follármela…
Tengo su sexo a mi servicio y me flipa sentirlo chorreando mientras mi verga entra hasta lo más profundo de su coño, sin dilaciones, sin vacilaciones…
Puedo compadecerme de ella. En ocasiones la dejo que se apoye sobre sus pechos pero prefiero verla aguantándose sobre el rostro, jadeando y gimiendo, a veces incómoda por la postura… Me da igual… Es mía… Es el juego del placer.

Mis caderas, sobre sus glúteos: Perfecto balancín el de su cuerpo. Mi mano izquierda agarrando sus muñecas  sobre la espalda. Mi derecha, maestra para darle esos azotes que la molestan del mismo grado que la ponen a mil… Me clavo en su chocho, el que me habré comido antes hasta haberla vuelto más loca, hasta que me suplique que la folle sometida ante mí. 

La quiero así de entregada, así de zorra… Porque la quiero mía. Aguanto como un jabato antes de correrme. Puedo hacerlo después de haberle sacado varias veces ese torrente que se rinde entre sus muslos, que me impregna, rocía, salpica y unta todo mi rabo; ese manjar fluido que escalda mi deseo, que hace que nuestros sexos chapoteen… Me pone a mil oírla jadear y gritar envuelta en esas oleadas de placer que la exprimen…
La dejaré seca pero, antes, antes me la habré follado tantas veces que le escocerá y brincará como un conejo con la sola intuición de que mi dedo se le acerque.
Me gusta perra.  Me gusta hembra… Y es mía, aunque sea la mujer de mi amigo. Soy lo que soy: un cabrón, pero un cabrón feliz que la hace feliz.


Esta es mi participación (309 palabras)  para la convocatoria de Dorotea desde "Lazos y raíces" donde podéis ver los trabajos de otros compañeros.

11 de noviembre de 2021

Sin Perdón no hay Venganza...

Composición de Neogéminis


Un Jueves, Un Relato 
De perdones y venganzas






Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío, ¿y el perdón? El perdón puede ser la más dulce de las venganzas. ¿Por qué iba a ponerme a su altura? Eso no me haría mejor y, además, me iba a restar un tiempo precioso de mi pensamiento. ¿Necesitaba yo darle la importancia que no merecía? Demasiado tiempo en mi cabeza era precisamente eso, concederle un valor que no meritaba.
De este modo decidí que el perdón era mi mejor arma. Qué pensara lo que quisiera.  Lo hacía por mí, no por ella, porque yo necesito seguir viviendo mi vida, necesito seguir siendo feliz y libre. Perdonar no es olvidar pero sí evitar el dolor. Tal vez no sea justo pero sí necesario. Preciso que mi corazón no contenga heridas. 
Bajo su desprecio, bajo su maldad y esa arrogancia se esconde un alma triste y solitaria, una persona infeliz e insegura. Hay tantas capas bajo su máscara que el peso de esta ya no le permite reconocerse, o lo que es peor, sentir emociones y sensaciones positivas porque estas las tiñe de puro interés o de dobles intenciones. 
No sé si primero va el perdón y luego la compasión pero sentí ambas cosas. Se rio cuando le dije que la perdonaba. No esperaba menos. Tampoco dije más. La miré a los ojos. «Te perdono. No necesito más», pronuncié para caminar sobre mis pasos dejando un abismo entre ella y yo. Yo me había liberado de mis cadenas. Ella seguiría soportando el peso de las suyas.


Esta semana nos convoca Moni desde "Neogéminis".  Este es mi aporte (257 palabras) y si os apetece, aquí la lista de participantes para leer otras historias alusivas al tema propuesto.

8 de noviembre de 2021

8 de noviembre...

Hoy es un día de esos que podríamos decir cualquiera si no fuera porque una vez más, un año más, la gente, que no está bien dicho, mis amistades, mis amigos, mis amigas, en la distancia pero tan cerca del corazón y del pensamiento me hacen llegar todo tu cariño envuelto en palabras bien sentidas, en imágenes que me identifican o que reflejan lo que les llega de mí.

Desde este rinconcito a cada uno de vosotros, desde lo más profundo de mi corazón, GRACIAS. Gracias una vez más por recordarme lo bonito que es ir haciendo amigos por el camino, atesorar sentimientos y verlos fortalecerse y afianzarse a lo largo de lo años, por lo bonito que es sentirse querida, respetada y, por qué no, admirada.  Se enorgullece el alma con la expresión de vuestro cariño, de vuestro recuerdo y de vuestra AMISTAD.


"Cuando pienso en el desierto, pienso en Ella. 
Su imagen me parece tan clara; un oasis en un océano de arena. 
Cálida. Vasta. Inmensa. Ella está. 
Es presencia... siempre. Sin importar tiempo ni distancias".










Y

Campirela
Paula
Demi
Tracy
Ester
Myr
Noelia
Albada
Don Dumas
Draco
Chema
Agapxis
Gabi

7 de noviembre de 2021

Cierre de Convocatoria...

Es el momento de dar paso a otro anfitrión pero antes he de felicitaros por la originalidad de vuestros relatos. Cada profesión nos ha dado muestras de cómo somos los seres humanos. Ha habido profesiones para aventureros, para tiernos, para románticos, para oscuros :-), para carnales; personajes que son en sí mismos una profesión y creo que hemos podido disfrutar todos con cada una de las historias. Pero sobre todo, ha habido esperanza e ilusión en la mayoría de los textos y eso es muy bonito y de agradecer. Todos aspiramos a un mundo mejor.

Yo, desde aquí, más que agradecida por vuestros aportes y, por vuestros comentarios que son fomento de amistad y compañerismo. Os pido que deis un último repaso al listado por si se nos hubiera pasado alguien.

Ahora, paso el testigo a Moni, Neogéminis, que nos pondrá a prueba de nuevo.

Y si alguien desea sumarse, estaremos encantados de recibirle, al igual que si le apetece dirigir un jueves. Para eso solo debe ponerse en contacto con Vivian a través de su correo elbalcondecas@gmail.com que, supongo, ahora para finales de año avisará de la disponibilidad de fechas para el primer trismestre.

3 de noviembre de 2021

Todo por la Ciencia...

Un Jueves, Un Relato 
Profesiones raras

Cuando me preguntan cómo me gano la vida tengo que inventar siempre lo mismo: «Me dedico a la Ciencia por eso siempre estoy en la universidad» pero, en realidad, mi trabajo es otro. Para algunos es un sacrilegio, un pecado, una herejía, un delito. Para mí es el pan que me llevo a la boca cada día y puedo asegurar que hay que tener muchas tripas para esto.
Unos nos llaman ladrones, otros saqueadores. Yo prefiero definirme como resucitador porque hago que los cuerpos se levanten y abandonen sus tumbas. No robo nada ni a nadie porque los muertos solo pertenecen a la tierra o al cielo y, a veces, al infierno. Y ni a Dios ni al diablo les importan.

Mi trabajo es duro, peligroso y sigiloso, amparado a la luz de la luna, solitario, porque faeno solo, y oscuro, siempre con los ojos bien abiertos. Cada día lo tengo más complicado. Los vivos tienen miedo de los muertos, en cambio, temen que les sean arrancados de las entrañas de la tierra. Los ricos crean sus mausoleos con muros altos y puertas seguras. sin embargo, se suman al teatro de ver muertos. Los pobres cada día hacen los agujeros más profundos y vigilan a sus muertos hasta que la podredumbre les da la confianza para abandonar la vigilancia. Y los del medio, entierran a sus muertos en ataúdes de hierro o enjaulan la tumba.

Trabajo por encargo, tengo mi salario y cuento con confidentes que me facilitan toda la información que preciso. No es lo mismo un cuerpo enterrado recientemente que uno de más tiempo, ni uno con anomalías a uno aparentemente sano, ni de mujer que uno de hombre y mucho menos uno de infante. En este caso, marco un precio tan elevado que reniegan de mis servicios. Sé lo duro que es enterrar a un hijo.

Sigo respetando a la muerte pero los muertos me dan de comer. Todavía tengo escrúpulos y no soy un asesino a suelto ni tampoco maltrato a los cadáveres. Trabajo limpio y tengo mis propias normas.  Ejecuto mis tareas de manera escrupulosa y soy el mejor. Una vez entregado el cuerpo, lo que hagan con él ya no es cosa mía.

Fotograma de la película El ladrón de cadáveres, 1954

Este es mi aporte para la convocatoria de esta semana (369 palabras). 
Picando en la imagen, podéis ir tanto a la dinámica como a la lista de participantes.