Un Jueves, Un Relato
Al otro lado de la puerta
Aquella noche llegué más tarde de lo habitual del trabajo. Al entrar, no había luz en la escalera. Otra vez. Subí a tientas porque no llegaba ni un misero reflejo de la calle. Tuve la sensación de que bajo mis pies crujía algo. ¿Cucarachas?
Qué horas para ir arrastrando muebles, pensé entrando en casa. Intuí que el ruido procedía del piso de abajo donde vivía aquel esquivo, malcarado y casi esquelético hombre. Mi abuelo le contaba al pájaro que era un hombre de esos —nunca especificaba— cuya única misión en el mundo, hasta que muriera o lo matasen, era cargarse a los politiqueros de tres al cuarto. Tenía faena, dije.
Como casi todas las noches, antes de irme a la cama, repasé mis notas de la comisaria. Era extraño tanta desaparición en mi distrito. Las más, la de la mujer de un carnicero y un hombre. Ambos en la misma zona. Sin embargo, a la noche siguiente, mientras preparaba la cena, mi abuelo parloteaba con el cuervo y le confesaba que el penitente del entresuelo se había cargado al cabronazo del cuñado del alcalde porque le había puesto los cuernos con la mujer del carnicero, la cual tenía relaciones también con el descarnado.
Chascarrillos de barrio, pensé. Mi abuelo y el cuervo mantenían conversaciones realmente increíbles.
Al tiempo, empecé a ver insectos que revoloteaban por mi ventana. Me pareció extraño. Me dio un giro el cuerpo. Tomé algunas muestras y las llevé al entomólogo forense quien me confirmó, sin lugar a duda, que pertenecían, como yo sospechaba, a la fauna cadavérica.
Moví Roma con Santiago e hice levantar al juez para que me firmara una orden de registro, avisé a mi compañero para que viniera con una patrulla hasta mi edificio y mantuviera en alerta a la científica.
Un equipo se presentó y en unas horas salió el viejo, esposado. El registro fue de lo más dantesco y dramático. Aquello era un depósito de cadáveres cortados a serrucho, perfectamente embolsados dentro congeladores camuflados en el sótano. Me esperaba una larga noche y unos días interminables.
Escuché a mi abuelo decirle al cuervo que ya sabía que era mala persona y un matón de los de antes, que su olfato no le fallaba y que aquello... olía a muerto desde hacía tiempo.
Este es mi aporte (381 palabras) para la convocatoria de esta semana "Al otro lado de la puerta". Picando en la imagen puedes acceder al tema y al listado de participantes.
Excelente Mag! No podía ser de otro modo😉 siempre ingeniosa a la hora de narrar historias en donde el misterio y la aventura se desenredan gracias a una buena cuota de curiosidad. Un abrazo
ResponderEliminarUn desenlace muy duro y por desgracia a la orden del día en los telediarios.
ResponderEliminarLa policía no es tonta por muy siniestros que sean los vecinos de este genial relato.
Un placer siempre leerte Mag
Besos
Uf!! Los pelos de punta, ese abuelo que es un adivino y ese vecino a quien nadie desearía como tal. Muy bueno, besos.
ResponderEliminarSiempre hay que hacer caso de la intuición de los mayores… En este caso, además, de ese revoloteo de insectos que bien delataban lo que allí se había guisado…
ResponderEliminarMagnífico relato, mi querida Mag; como ya nos tienes acostumbrados…
Perfecta narrativa, y de imágenes que atrapan en tan dantesca atmósfera; lo he disfrutado mucho, preciosa.
Abrazos enormes, y muy feliz noche 💙
Como no podía ser menos en ti, un excelente relato, ya nos tienes mal acostumbrados ;) Te felicito, has captado el aire de los cuentos Poenianos.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Da escalofríos. Y es gracias a tu buena ambientación de misterio; las cucas, los bichos de los muertos, el abuelo con su olfato de sabueso policial... Me ha gustado esa relación del hombre con su cuervo, quién sabe si no sería el cuervo el que le soplaba secretos...
ResponderEliminarMuy bueno :)
Un abrazo y gracias por el disfrute de esta convocatoria tan divertida :)
Me gustó muchísimo, una historia simple, muy bien llevada.
ResponderEliminarEntretenida desde la primer palabra mujer!!!!!!!!!!!!!!
El pájaro junto al abuelo, se llevan aplausos a la hora de comentar, mientras el protagonista investiga.
Que bien se te da lo policial.
Un abrazo Mag :)
Estas hecha toda una detective, pero ese abuelo era lo más. Me ha gustado mucho como lo has ido encadenando y llegar a solucionarlo . Es como un corto o mejor dicho un caso resuelto. Un besazo y muy feliz noche.
ResponderEliminarIncreíble tu relato Mag, misterio y suspenso que nos sumergen en el relato, un gran homenaje a Poe, te ha quedado maravilloso , con tintes de locura y magia.
ResponderEliminarEs un placer visitarte, leer lo que tu corazón expresa, lo que tu ingenio es capaz de crear y la ternura que mueve tu alma.
Deseo te encuentres bien amiga Mag, que esa bondad que tienes te proteja siempre, no dejes de sonreír.
Un aporte magnifico, eres una gran creadora y hoy lo demuestras, original dentro del tema propuesto, por ti misma, Abrazucos
ResponderEliminarEscalofriante relato, muy bien narrado. ¡Ajjjjj! Lo leí mientras cenaba. No debí, La pestilencia llegó hasta mi mesa jaja. Gracias por esta genial convocatoria, es la primera vez que escribo algo de terror. A mí me resultó imposible hacerlo más corto, así que te felicito. Muchos besos, querida Mag y mil gracias por tu anfitrionazgo.
ResponderEliminarPreciosa aportación, es ese sótano, iras el trabajo policial.
ResponderEliminarUna historia excelente. Un abrazo
Hola guapa , buenos día vaya pasada de relato , quién lo iba a imaginar que en ese edificio había una Morgue , jajajajaj me a gustado mucho tu relato y el gif del cuervo , esta muy logrado.
ResponderEliminarEste me recuerda , a uno que escribí que se llama " Lo que se esconde detrás de una ventana"
aquí te dejo el enlace para que lo leas si quieres ,http://elbauldemislibrosyjuguetes.blogspot.com/2018/10/lo-que-se-esconde-tras-una-ventana.html
Te deseo una feliz mañana , besos de v...flor.
¡ Qué horror!
ResponderEliminarMäg un relato , que podría estar basado en hechos reales. Un guión digno de una película de terror.
La foto animada del cuervo , impacta.
Pues eso, que te doy la enhorabuena por tu creatividad y tu buen hacer relatando.
Un abrazo y feliz fin de semana.💚
Que me has hecho disfrutar, mi querida Mag, está demás que te lo diga. Maravilloso relato, potente y místico. Un placer leerte Sra. Poe ��
ResponderEliminarMil besitos con todo mi cariño y feliz noche ❤️
Y en los diálogos con el cuervo, el abuelo demostró su experiencia, su talento para descubrir la verdad. El asesino no tuvo en cuenta a los insectos. Puede ser que la cantidad de cadáveres lo haya delatado.
ResponderEliminarMagistralmente contado.
Besos.
jolin, Me he asustado cuando bajaba la pagina y el cuervo de la foto se ha movido. jaja
ResponderEliminarPuaj ... los insectos cadavericos por toda la escalera. Msgnifica la deductiva del abuelo y su olfato. Cuando propusiste lo de Poe, pensé que sí que lo habia leido todo, pero no. Lo tengo asimilado asi porque lo que sí vi fue el ciclo de Roger Corman que daban los sabados por la tarde de hace mucho, y no me perdia ni una.
Jo, con la foto del cuervo...
besosss Mag
¡Quizás debería ser el abuelo quien trabajase de policía! jajajaja Me encantó el final; sí que debía de oler a muerto desde hace tiempo, con tantos cadáveres.
ResponderEliminarUn besazo, Mag
Solo puedo daros las gracias y azorarme porque me veis con buenos ojos :-) Todos habéis hecho un magnifico trabajo así que el mío solo espero que alcance el vuestro. Si os ha gustado yo me doy por contenta, la verdad.
ResponderEliminarNo se me da muy bien esto de detectives y cosas de esas pero bueno, intentándolo igual sale algo :-) :-)
Reitero, muchísimas gracias y muchísimos besos.
Cuidaos todo lo que podáis y sed felices.
Muy buen domingo a todos.
Muy logrado tu relato, Mag.
ResponderEliminarEl protagonista del relato nos va llevando al desenlace, él tranquilo pero aterrando cada vez un poco más al lector, has podido captar el drama y la tragedia. Es escalofriante y lleno de simbolismos tétricos. Me encanto Enhorabuena, te felicito!
Un abrazo