En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.

21 de febrero de 2015

Siempre cogidos de la mano (5)

- ¿Dónde está el puente?
- ¿Qué puente?
- El puente que cruza el río y nos lleva a la ciudad.
- Pues…, no sé. Quizá detrás de esa torre, esa que guardan los ancestros de oro…
- ¡Anda! Aquí también hay…
- ¡Sííí! Están por todas partes…, como tu aroma, como tu alegría, tus maneras… Como nosotros juntos… Como las ganas que te tengo siempre: De tocarte, de acariciarte, de comerte… De disfrutarte… Como el enredo de tu mirada con la mía, de tus brazos con los míos, de mis labios con los tuyos, de mis piernas entre las tuyas… ¡Sííí…! ¡Estás en todas partes!

En un balanceo que nos mueve a los dos.

- ¡Calla, tonto! Que hasta las estatuas se ponen coloradas… ¡Mira, el puente!
- Sí, en eso estaba pensando yo…, en el puente.
- ¡¿Sí?!
- Pues, no… -Yo reí. Ella rió.

-  ¡Qué tonto! ¡Anda, vamos a cenar algo y después…, después, habrá tiempo de todo.

Siempre cogidos de la mano...
(tu yo) 

 

Y sentir el tacto de tu mirada mientras me observas desde el otro lado de la mesa. Percibir tu sonrisa como una cascada que me salpica mientras te peleas con los caracoles de tu plato…
Y brindamos chocando nuestras copas de vino: Por ti, por mí… Por nosotros. Por los sueños: Los tuyos y los míos. Los de los dos. Por los besos que nos asaltan y por los que conquistamos. Por los abrazos percibidos, soñados y entregados. Por los silencios compartidos…, por tus buenas noches y mis buenos días…
Por eso… Porque el mundo queda a nuestros pies, porque el tiempo es nuestro y capeamos el destino, entre ausencias y presencias, entre las miradas que abrazan, los besos que queman, los enredos de tu piel sobre la mía, ¡o de la mía sobre la tuya!, y las virguerías de los dedos, de las manos, de las bocas…: De la tuya y de la mía.

Por los balanceos, por los embates, por las idas y venidas… Por el alma y por el cuerpo.
(mi tú)

6 comentarios:

  1. Que bonito ese tu y el, esa complicidad en el amor y en deseo, cogidos de la mano y de las almas unidas amandose y quemandose entre besos encendidos de pasión.

    Un beso.

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    1. Es cierto que lo es. Y cuando las cosas surgen por sí mismas, siempre todo es mucho mejor. Es un tomo que te doy... Cógelo porque es tuyo.
      Un beso.

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  2. Los puentes... los he siempre encontrado construcciones maravillosas... unen dos puntos, dos partes que hacen una...
    Brindo por los puentes del alma... los puentes de la complicidad... los puentes construidos desde y con el amor... brindo por vuestros puentes!

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  3. Joder....no os solteis ni en cuerpo ni en alma... poco mas puedo añadir...
    un besote

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  4. De la mano siempre ha de ir todo amor, sin soltarse ni en los peores momentos.

    Besos dulces.

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  5. Mil gracias a tod@s por vuestros comentarios.
    Los puentes son para cruzarlos y avanzar. El ir cogidos de la mano mantiene el equilibrio.
    Besos.

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Sueña porque soñar es vivir y vivir es sentir...