En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.
Muy buen relato, me gustó mucho.
ResponderEliminarBesazo.
Muchísimas gracias, Paula, por tus palabras.
EliminarUn beso grande.
Un evento así no puede ser solo secreto de uno, además de Carpacho que seguro no dice nada :) Muy buen relato como siempre nos regalas.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Él ni mú :-9) Supongo que se resaltó el tema del haz de fuego y se escondió todo lo demás, sea lo que sea.
EliminarMuchísimas gracias, Mi Estimado Dulce.
Un beso y muy feliz domingo.
Secreto a voces cuando lo que se ve asusta. Siempre hay alguien que observa y otro que habla.
ResponderEliminarSiempre un placer, amiga
Beso grande
Suele suceder así, amiga, o bien, se ocultan cosas porque la gente no está preparada para determinadas cosas. Puede ser un OVNI o, simplemente, un avión militar fuera de tiempo. Sea lo que sea, él tiene el secreto sin desvelar.
EliminarUn beso muy grande y mil gracias.
"Hasta el perro se lo tomo en serio y dejo de correr, seguro que era real esas cosas pasan pero mejor no contarlas..." Lo has contado tan bien que convences, realmente una imaginación fabulosa y un resultado magnifico. Abrazos
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Ester. Mis protagonistas tienen la magia de atraparme y me llevan de la mano para que mis letras escriban lo que sus ojos ven y así pueda transmitirlas.
EliminarEl perro es el mejor amigo del hombre, dicen, así que normal que guardara su secreto :-) :-)
Un beso muy grande, Ester.
Una nube de fuego cruzando el horizonte puede ser una señal de alegría o de desgracias. Supongo que todo depende a que lado nos encontremos... supongo que habrá una continuación para resolverlo ;)
ResponderEliminarHola, Beauséant.
EliminarEn estos casos, suelo dejar la miel en los labios, ese espacio en blanco para que cada uno elucubre un final :-9
Muchas gracias por acercarte.
Besos.
Muy buenas tu relato este jueves podría ser verdad, porque ahí fuera sin duda algo hay. Y nos visitan y quien tiene la oportunidad de verlo aunque se asuste es un privilegio. La imagen que has puesto me encanta es delicia pura. Un placer siempre leerte Mag, sean en la modalidad que sea. Un besote y mis felicitaciones.
ResponderEliminarGracias, Campi. La imagen que he logrado encontrar, o ella a mí, siempre tengo mis dudas, tiene, a mi modo de ver, el misterio justo para saber qué pudo ocurrir aquella noche, qué era lo que vieron y qué lo que pudieron mirar.
EliminarDebió ocurrir algo especial porque están cubiertos de hiedra :-)
Un beso enorme, Campi.
Muy feliz domingo y semana.
Me quedo con ganas de seguir leyendo. La prosa es magnífica,
ResponderEliminarhasta con los ladridos de Carpacho y da para el inicio de una novela.
Además lograste ensartar tres, no dos, frases en tu relato. ¡Buenísimo!
Y que bonita palabra "alamdias" para canoas. Beso enorme.
Hola, Myr.
EliminarMe gusta poner siempre palabras curiosas y, en su caso, tengo la osadía de inventarla, sin cortarme un pelo :-)
¿Una novela de ficción? Puede ser.
Muchísimas gracias, Myr, una vez más tanto por tus palabras como por tu presencia.
Un beso grandioso :-9
Estremecedor, mi querida Mag. Se respira el desasosiego, la incertidumbre del momento, pero todo con la belleza nocturna Muy bien descrita. Te felicito. Me ha guardado mucho.
ResponderEliminarMil besitos llenos de cariño para ti y feliz noche ❤️
Mil gracias, mi querida Auro.
EliminarCreo que la curiosidad le podía más que todo, lo que no espera fue ver lo que vio, fuera lo que fuera.
Un beso muy grande lleno de cariño.
Estupendo, Mag! me encantó, sobre todo por ese gesto de dejar abierto a la imaginación del lector los detalles de lo que fuera un secreto, que tan bien compaña esa imagen con que has coronado tu relato. Precioso. Muchas gracias por participar. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Moni. Es un placer tenerte por aquí y leer comentarios tan bonitos :-9
EliminarLa imagen, es cierto, es bonita, sí :-)
Un beso muy grande.
qué bonito relato! una esfera luminosa en el cielo es un fenómeno del que los medios deberían haberse hecho eco, pero no fue así, y sin embargo el protagonista lo vio con sus propios ojos. me ha recordado al capítulo 'la burbuja' de 'verano azul', cuando a chanquete un amigo suyo le contaba que había visto una extraña luz en el cielo, pero no se atrevía a contarlo por miedo a que no le creyeran.
ResponderEliminarbesos!!
Hola, Chema, a veces ocurre eso. No decimos las cosas porque nadie nos iba a creer. En este caso, además, solo hablan de una bola de fuego, lo que hay tras ella o por ella es un secreto que, aparentemente, solo él y Carpacho saben. Ahí lo dejamos, que el misterio nos inunde y nos haga muy curiosos.
EliminarUn beso muy grande.
Me encantó Mag, cómo se iba sintiendo el personaje, la descripción magnífica del lugar, ese trayecto nervioso junto a Carpacho como único cómplice de lo que pasaba.
ResponderEliminar...y los otros que como siempre se callan por si quedan en evidencia.
No sé si a ti te ha pasado, pero hay mucha gente que sí y coincide con una luz o bola y curiosamente en distintos lugares.
Un beso enorme y gracias por este momento de buena lectura.
¡Sí yo te contara las cosas que mis ojos han visto y mi alma ha sentido!...
EliminarPero sí que callamos, primero porque no siempre sabemos cómo explicarlo, segundo porque según qué cosas no se pueden contar a todo el mundo :-9 y tercero, porque nos gusta guardarlas :-9
Gracias a ti por pasarte y dejarme estas palabras.
Un beso muy grande.
Usaste tres, y magníficamente colocadas. Una historia donde esa bola de fuego sí existió.
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz finde
Bueno, vinieron al caso, Albada :-)
EliminarMuchísimas gracias por tus palabras y sí, la bola existió :-9
Un beso y muy feliz día.
ser testigo de hechos de este tipo para la mayoria de la población se juzga con ligereza. Un familiar cercano mío una noche ( siempre en las noches ) contempló desde la cama mirando la ventana pasar a cámara lenta algo más definido que una luz. No pongo en duda la visión por que siempre creí todo lo que viniera de su boca. Un abrazo
ResponderEliminarEn las noches tenemos los sentidos como más agudizados, sobre todo si estamos a solas, y en ese caso, a veces la mente juega muy malas pasadas. No siempre hay que dudar de lo que nos dicen como "raro", el universo está lleno de misterios. Y muchos se dejan ver, otra cosa es que se dejen comprender :-9
EliminarUn beso y muchas gracias, Rodolfo.
Mag ¿No puedes compartirlo conmigo? Suena tan precioso e irreal que me quedo intrigada. Besos.
ResponderEliminarEs que prometí no contarlo y ya sabes, los secretos si se cuentan, dejan de ser secretos :-) Inma :-9)
EliminarIrreal, irreal... No sabría decirte :-9
Un beso.
Un hecho insólito que me ha puesto, al ir leyéndote, en otra de las personas que presenció el suceso. Qué bien lo has contado. también yo guardo el secreto.
ResponderEliminarGracias.
Un beso.
Me parece perfecto porque, como le he dicho a Inma, todo lo que se cuenta se acaba sabiendo :-9
EliminarMuchísimas gracias por tus palabras, Tracy.
Un besote.
La noche siempre mágica y misteriosa le da vida a un buen relato, que va describiendo esas escenas nocturnas motivadas por ese haz de luz y su secreto,que enigmático deja abierta la historia para que cada cual imagine lo que quiera.Lo cierto es que nadie lo vio, ni hubieron noticias sobre ello,o no quisieron saberlo. Tal vez se asustaron o sólo tuvo la suerte de ser partícipe el protagonista y su perro. En cualquier caso nos dejas un relato que pasa de la tranqulidad de esa noche oscura al misterio de lo que sucedió en la misma.
ResponderEliminarMe ha gustado, muy bien construido y perfectamente llevada la narración. Además incluyendo tres frases en lugar de dos. Te dejo mi aplauso.
Un beso,Mäg y buen fin de semana.
Hola, José.
EliminarMuchísimas gracias por todo lo que dices. Me alegra mucho que hayas visto todo eso y en la forma de llevar la narración. Lo agradezco sinceramente.
Está el juego de la calma y la precipitación, la sorpresa y el no poder compartirla o, mejor dicho, no querer.
Un beso.
Los misterios del cielo nos visitan desde la antigüedad, aunque no todos cuentan sus experiencias o visiones. La incredulidad o burlas lo impiden. Yo pienso que sería una pena que no existiera nadie más, aunque la estabilidad del mundo y sus creencias se tambalearían con estas visitas.
ResponderEliminarMe gusto tu relato Mag.
Un placer leerte
Besos
Yo deseo que acaso no vengan, por si las moscas. No sé quién lo dijo, ¿Asimov? hay muchas teorías, algunas muy bien argumentadas pero que no dejan de ser elucubraciones. ¿Misterios?, como dices, desde el primer segundo de inexistencia.
EliminarGracias, Charly :-9
Un beso.
"Conas ansias que prudencia" y "una curiosidad desconocida en mi", dos frases preciosas que demuestran la fluidez del relato, que hacen fluir, sin trompicones la accion6que además condensan la esencia del contenido.
ResponderEliminarMe ha encantado sobre todo la aparente facilidad con que el texto se desarrolla. El perroas listo que el humano cuando de la naturaleza se trata.para variar, se quedó atrás , porque sin verlo ,ya reconoció algo...impublicable, por decirlo suavemente.
Besosss estelares, Mag
Los animales tienen ese sexto sentido que el primigenio instinto y que los hace más sabios que a nosotros. Por algo será.
EliminarMil gracias por lo que dices del texto. Te lo agradezco porque eso me ayuda a confiar más y hacerlo mejor.
Un beso muy grande.
Un relato de estos que te dejan con la piel erizada
ResponderEliminarmas con este fondo negro :)) que a mi me encanta como no.
Tienes ese don que para mi entre pocos, contados.... eres como sabes
mi admiración en tu forma de escribirlo y tanto, que nos llevas a vivirlo
Mil besos y mi cariño, que te abracen siempre Mag
¡Cora, qué alegría volver a verte!
EliminarMe llega tu cariño, no dudes, y me sonrío al verte aquí, aunque te he ido viendo en tu blog y eso me ha hecho sentirme feliz por ti.
Gracias por tus palabras y por verlo así.
Un beso muy muy grande, con un gran abrazo.
Me has enamorado con el nombre del perro: Carpacho <3
ResponderEliminarLa bola incandescente resultó ser todo un mistero que solo el protagonista y su mascota descubrieron.
Un besazo, Mag
Hola, Dafne.
EliminarLo primero que me surgió. ¿Por qué? Ni idea :-9)
Un misterio para él resuelto porque el perro nunca llegó hasta dónde él estaba :-9
Muchas gracias :-)
Un beso grande.
Que intriga nos dejas con esa visión. Que fue lo que vieron la protagonista y su perro. Que nadie más parece haber percibido.
ResponderEliminarBien contado.
Besos.
Es que si te lo digo, Demi, el misterio estará casi resuelto... y no es cuestión. La curiosidad es una acicate para seguir :-)
EliminarUn beso enorme y gracias :-)
Adoro los animales, especialmente los perros. Siempre los he tenido. ¡Qué buen relato! Un beso.
ResponderEliminarYo también he tenido siempre animales en casa. Ahora solo un pájaro. El otro se me escapó hace unos días :-9
EliminarGracias por pasarte, Carmen.
Un beso enorme.
Un placer leerte Mag, todo un misterio por resolver para el protagonista y su fiel amigo Carpacho. Me ha encantado tu relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegra que te haya gustado, Dakota.
EliminarA mí me encanta que hayas pasado por este rinconcillo.
Un beso enorme y mil gracias.
¡Hola Mag!
ResponderEliminar¡Qué original y escalofriante texto!
De principio a fin te mantiene atada a la intrigante narración, sobre todo la sucesión de los hechos y el final con el suspenso. ¡Muy bien planteado!
Un abrazo y feliz comienzo de semana.
Me halaga muchísimo tu comentario, Yessy, que tú eres la maestra de lo oscuro :-9
EliminarGracias por tus palabras, niña.
Un besote.
Si, los secretos son solo nuestros. Interesante relato.
ResponderEliminarBesos.
En que salen de ahí ya pierden algo de sentido, ya corren el riesgo de dejar de ser secretos.
EliminarUn beso, Fer.
Un haz de luz, como un presentimiento, nunca dejes de seguir un presentimiento. El fuego es la energía que nos mueve. Quizás un fuego interno.
ResponderEliminarGustab