Se me olvidó...
Temo olvidar el olor de la tierra,
el sonido de las gotas de cielo bendiciéndola
y el del agua dulce jugando entre las piedras.
Temo olvidar las lágrimas de sal crespadas ignorando el horizonte
o su calma besando estas costas salvajes.
Temo olvidar el susurro del viendo acariciando las llanuras,
subiendo las laderas o remolinando en las cumbres.
Temo olvidar el chasquido de mis pasos sobre las hojas,
o la impronta de mi impulso solemne sobre la hierba
que descansa mansa bajo el rocío o la rosada de estos amaneceres
donde fuego y cerúleo se entremezclan en armonía.
Temo olvidar los brillos de la luna
y convertirme en la previa de un cuarto creciente.
Me rindo a estos pétreos silencios,
remarcados por el paso del tiempo,
tintados del olvido que no quiero olvidar
y descubrir, tallados, los recuerdos yacientes de los ancestros
para sentir, como una caricia rota en el alma, los míos propios...
Hechos cenizas.
Hechos barro.
Hechos musgo.
Hechos hierba.
Hechos flor de eco.
Reminiscencia de lo que fui sin ser.
Vivo al arrullo de un nombre callado,
custodiado por soledades a los pies de este ángel
—me mira con la liturgia de quien nunca olvidará—.
Ahora,
sin el nombre revelado,
poseo la libertad de quien jamás podrá ser reo,
de quien jamás dejará de amar.
Ahora,
soy el viento que acaricia,
la lluvia que empapa.
Ahora,
en mi descanso inmortal,
soy el mismo Olvido que tú recordarás.
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| Balo licencia gratis de Pixabay |
Este es mi aporte (237 palabras) para la convocatoria juevera de esta semana.
Picando en la imagen podéis ir tanto a ella como al listado de participantes.
¡Qué belleza de poema! ¡Qué belleza!
ResponderEliminarRecordar a quienes han partido y amamos es la esencia de nuestra humanidad.
Besos enormes, querida Mag.
Hola, Mag:
ResponderEliminarHas escrito un poema de gran intensidad, mientras te escribo mis impresiones siguen rimando con tus versos.
Temo ser olvido. De todas las muertes que he compartido es la que me parece más cruel. Como anécdota te comento que hace unos años escribí una novela cuyo borrador titulé “Buscando el olvido” (creo que hay entradas en mi blog donde la menciono). Había algo en esa novela que no me convencía. La revisé y reescribí hasta que comprendí que era el título.
Un abrazo, Mag.
Tememos olvidar y luego? luego quién sabe cuánto nos recordarán.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda.
Un gran verso final cierra el círculo de un muy original poema de bellas inspiradas instantáneas... envidiablemente depuradas, además.
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
Viene el tiempo de recordar. El olvido no es opción.
ResponderEliminarDesde el principio al final es un recuerdo de algo que tememos perder y eso mismo hace que nos esforcemos en no olvidadlo .
ResponderEliminarPreciosas y emotivas palabras Mag.
Te dejo mi abrazo y mi besote . Feliz resto de semana.
He ido cambiando de imálgenes sl ritmo que te leía. Primero pensaba en algo de la naturaleza. Luego pensé que era el inevitable olvido que provoca la edad.
ResponderEliminarPero luego veo que es el olvido de si mismo, que trata el prevenir con el recuerdo de los ancestros.
Muy duro e intenso poema.
Beso enorme, Mag
Bellísimo poema amiga, pura magia, besos.
ResponderEliminaralguna vez he pensado que cada acto insignificante como un paso que damos o una hoja que cae, forman parte de la historia del mundo. nosotros lo olvidamos, pero la inteligencia subyacente que hay detrás -se llame como se llame- seguro que no.
ResponderEliminarun poema bello y sugerente. besos, mag!!
Me ha encantado, qué elegancia de pluma.
ResponderEliminarBesitos.
Que maravilla de poema, me has dejado sin palabras, es un deleite siempre leerte,
ResponderEliminarsoy pesada, pero es así... olvidar ese miedo, mas hoy con esta enfermedad que se lleva
hasta a quienes están, que doloroso olvidar hasta quien somos preciosa.
La imagen es bellísima, la conozco bastante, porque la guardé por algo, hace unos meses.
Besitos enormes a sonreir y mi cariño siempre, muy feliz finde.
La vida es olvidar cosas hasta que nos convirtamos también en olvido... un poema muy intenso, me ha gustado.
ResponderEliminarPrecioso poema, Mag, intenso y emocionante, cargado de imágenes que llevan a deslizarse por los versos y las palabras.
ResponderEliminarAl final nos imaginamos siendo recuerdo, al menos es lo que todos esperamos, que nunca se nos olvide, aunque solo sea por esos poquitos gramos de vida que dicen es el alma.
Un abrazo. Me gustó tu jueves.
Una belleza de poema :))) Ciertamente es solo pensar dejar de sentir, de emocionarse vivos es algo que aterra un poco. Luego está el olvido de los demás (también nuestro propio olvido) ¡y ese olvido qué más da! los hechos de amor, de bondad son como vida perpetua que nos sobrevive y antecede. Pero con el final del poema vuelvo al principio, tu poema me lo recuerda, es aterrador, nos estamos cargando la naturaleza, la vida, ...
ResponderEliminarUn abrazo muy grande Maǧ, feliz y amoroso fin de semana.
Las enfermedades que borran la memoria son terribles, nefastas, socavan la raíz de la personalidad y exponen a las personas a que su identidad se disgregue en la niebla del olvido. Muy triste. Un abrazo
ResponderEliminarBellísimo… Una excelsa oda a la vida más allá de la carne… De inmensas y hermosas imágenes… Con fuerza, a la vez que pleno de la sensibilidad de un alma que emite su voz…
ResponderEliminarUn verdadero placer, preciosa.
Abrazo enorme, y muy feliz finde 💙
Un poema muy intenso y precioso, me ha emocionado.
ResponderEliminarUn besazo.
Unas palabras llenas de poesía que evidencian el temor que tenemos todos a olvidar esas pequeñas cosas que dan sal a la vida y que mencionas en las primeras estrofas, para acabar con un broche estremecedor: "en mi descanso inmortal, soy el mismo olvido que tú recordarás"
ResponderEliminar.Una preciosidad, amiga.
Hola, Familia.
ResponderEliminarMillones de gracias por pasaros a comentar y dejarme vuestras palabras.
Me gusta que cada uno haya tomado su perspectiva y esa, en cierto modo, hilvane con la de los demás.
Habla la muerte. Habla el olvido. Habla el ser que nunca supo que fue y siempre será.
Cuidaros mucho y, de nuevo, mil gracias.
Besos.
Que versos tan inspirados y con misterio.
ResponderEliminarUn gran aporte a tu propia convocatoria.
Besos con admiración.,
una vez más es un placer leer tus letras, Un abrazo
ResponderEliminarEl olvido...
ResponderEliminarDe pronto pienso... para qué el olvido, para qué el recuerdo.
Cuál será el lugar que la eternidad tiene reservado para el andante.
Volverá al silencio de dónde vino?
O los recuerdos serán su mundo...
Si así fuera... qué hará con ellos, o... qué harán con él.
Misterios guardados bajo siete llaves.
A menos que...
Buen día, Mağ. Un gusto estar en tu blog 📘
Hola, chicos, chicas.
ResponderEliminarVuelvo a pasarme por aquí y dejaros mi cariño y mi gratitud.