En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.

25 de noviembre de 2023

Ecos infinitos...

Un Jueves, Un Relato
Citas de libros


«Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos». 
'Bajo la misma estrella'
John Green



Me di cuenta el día que rompí aquella puerta del silencio y una venda de partículas de polvo trazó un sendero de luz por toda la estancia. Una fragancia dulce de almendra y vainilla impregnaba el aire mientras los ecos olvidados del tiempo susurraban en cada rincón.
Mis pasos, sobre pasos vencidos, testificaban historias acogidas por almas que buscaban refugio entre páginas ajadas por el transcurso de los días. Habitaba el eco de un murmullo incesante, alientos de vidas no vividas. 

A veces, el polvo y las telarañas tienen su encanto. Un soplo y la vida se iluminó en aquel libro cuyo título era replicante de mi pensamiento. Mis dedos acariciaron sus hojas desgastadas, en tanto mi mente se sumergía en un océano de letras. Fue entonces cuando su voz resonó en mí como un eco lejano que llama a la revelación.

El reloj de la pared, donde la araña se balanceaba, empezó a marcar un tiempo indescriptible, rescatado del olvido. Un terremoto interno precedió a una calma intensa. Percibí dentro de mí el estallido de un ser que no era yo. Entonces comprendí aquello de los infinitos, aquello de lo que Inés me hablaba desde la profundidad de su silencio, desde los intensos encuentros más allá de la percepción lógica. 
En ese instante de epifanía supe que aquel rincón suspendido en el tiempo era un regalo, un espacio donde las historias renacían entre los suspiros de libros olvidados y tejían su propia eternidad en las páginas que una vez yacieron en sus manos.

Inés me había regalado el tesoro más preciado: la vida perpetua de vidas infinitas talladas en el tiempo, ahora reposando en las mías. E Inés sonríe.

Mujer joven oriental / Friedich von Amerling / 1854


Este es mi aporte (280 palabras) para la convocatoria juevera de esta semana. Picando aquí podéis ir tanto a ella como al listado de participantes que han colaborado con sus narrativas.

16 comentarios:

  1. Me ha encantado. Es como una oda a los libros. Tiene un estilo delicado, etéreo, que te envuelve en una preciosa ensoñación. La sonrisa final ilustrada le da un toque perfecto... y encantador.
    Enhorabuena por esta preciosa prosa poética.
    Un abrazo grande :)

    ResponderEliminar
  2. Bonitas letras. He disfrutado leyendo esta entrada. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  3. La vida como un infinito, un regalo incommensurable, sin duda una epifanía transportada a las letras.

    Otro beso dulce Mi Estimada Magda.

    ResponderEliminar
  4. Los ecos infinitos que sólo se dan en viejas librerías, tiendas de antigüedades, edificios y lugares muy vividos.
    Me encanta cómo escribes y describes, Mag. "La venda de partículas de polvo que traza un sendero de luz, la fragancia de almendra dulce y vainilla, que ayuda mucho a sentirse dentro de ese lugar vetusto. El detalle de la araña balanceándose en el reloj de pared...
    Precioso texto. ¡Gracias!

    ResponderEliminar
  5. Un regalo maravilloso que Inés decidió compartir con quién sabría valorarlo. Muy intenso y emotivo tu relato, pleno de imágenes sensoriales capaces de ubicarnos en ese espacio tiempo tan especial. Un lujo leerte, MAG. Felicitaciones por el éxito de la convocatoria. Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  6. P.d creo que deberíamos destacar la importancia de la reciprocidad de lecturas y comentarios entre quienes participan de nuestros jueves. Hay nuevas incorporaciones que no se molestan en leer todos los textos, por lo menos no comentan en relación a lo escrito

    ResponderEliminar
  7. que bonita introducción de ambiente en (supongo) una vieja biblioteca, aunque lo antiguo son los libros y las historias que contienen.
    Y después el momento en wue la lectora cae dentro dela historia, cuando traspasa ese límite.
    Hemos cogido la misma frase, una que da para mucha variedad de temáticas, como l de tolkien
    Megabesooo amigs

    ResponderEliminar
  8. Un precioso texto, que nos envuelve en un mundo donde la maldad parece que no figura en el diccionario,
    Los libros nos dan esa magia que nos hace transportarnos a mil rincones.
    Gracias, Mag, por la convocatoria, te mando un beso y abrazo, deseándote una feliz semana.

    ResponderEliminar
  9. hay infinitos más grandes que otros. es una idea que intento transmitir año tras año cuando me toca explicar límites de funciones.
    en los libros se narran historias que perdurarán eternamente, para cualquiera que quiera leerlas. los personajes no envejecerán durante la espera.
    la lectura es muy enriquecedora. yo leo más que escribo, en mi blog publico sólo semanalmente. me falta tiempo o imaginación para hacerlo más a menudo, o quizá soy demasiado perfeccionista y escribir un post me deja exhausto.

    ResponderEliminar
  10. Esta imagen me parece haberla visto en la casa Árabe de Córdoba.
    Una palabras mágicas que nos obligan a indagar en la filosofía.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. Me encanta como cierras con el regalo de "vida perpetuas de vidas infinitas talladas en el tiempo". Es lo maravilloso de los libros donde se guardan las historias y nos dan la posibilidad de andar por lugares insospechados, aprendiendo, sintiendo, amando.

    Un abrazo Mag, :)

    ResponderEliminar
  12. Un relato maravilloso para tu propia convocatoria, Mag.
    Adoro las matemáticas, y cuando estudié en el instituto las indeterminaciones, los límites y los infinitos quedé fascinada. Ya entonces intuía que estos van más allá de los números; ahora sé que están íntimamente relacionados con las emociones.
    Una biblioteca es el lugar perfecto para sentirse infinito dentro de otros infinitos ;)
    Un besazo

    ResponderEliminar
  13. La vida es infinita en un mar de efimeridades.

    Saludos,
    J.

    ResponderEliminar
  14. Esos infinitos, dúctiles, que se solapan, qué buen juego te ha dado. Me encantó leerte. Lo que dió de sí esa frase, qué bárbaro..

    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  15. Hola Qamar: "entre los suspiros de libros olvidados", me encanta. Una gran composición, prosa poética como siempre entre tus manos. Inés, efectivamente, le había regalado una de las cosas más bonitas de este mundo: los libros. Precioso relato, me ha gustado mucho. Te felicito.
    Un abrazo. :)

    ResponderEliminar
  16. Un texto precioso, lleno de metáforas. Muy poético. Un placer leerte Mag. Me encantó! Un abrazo!
    lady_p

    ResponderEliminar

Sueña porque soñar es vivir y vivir es sentir...