En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.
28 de diciembre de 2018
Rapunzel...
23 de diciembre de 2018
Cierre convocatoria...
y es lo que me cabe reafirmar, sentir y dar
por estar a ese otro lado de la pantalla,
por ser vosotros, vosotras, simplemente,
sin dobleces,
con la esencia a flor de piel,
brotando hacia adentro
desde cada palpito del corazón...
hacia el alma.
Feliz Navidad
20 de diciembre de 2018
Abiah de Bayethlehem...
La voz de mi madre, siempre eterna en mí, era tan dulce como su mirada. Nos sentamos frente a ella, bajo la sombra del olivo del patio. Su sola mirada nos llenaba de amor.Sentaros aquí, hijos míos, a mi lado. He de contaros algo.
Os voy hablar de cómo supe que iba a traeros al mundo y de por qué solo te esperaban a ti, hijo mío, y tu hermana fue el ángel que voló sobre tus alas. La noche antes de que nacierais tuve un sueño. Ante mí, una luz que no se parece a ninguna otra que haya vuelto a ver, me habló con serenidad y su voz transmitía mucho amor:
… mañana parirás a tu hijo: Ieshúa, aquel al que llamarán Elegido. Así es la voluntad de tu Señor. Y también ha querido que paras a tu hija. Tu hijo será el pilar de tu vida pero ella, a la que bautizarás como Abiah, pues Dios es su Padre, será la fuerza que lo sostenga y, de su hermano, será la luz de su sombra. Enseña a tu hijo a escucharla pues ella es maestra de la sabiduría y la verdad. Su verbo será la Palabra de su Padre de la cual tu hijo tendrá el don para transmitirla.
Dios quiso que tú te llamaras Ieshúa, y en ti está el corazón del mundo al que debes salvar. Confía y todo será dado. Abiah, tú has de estar con tu hermano. Has de ser su bastón y su luz en medio de la oscuridad, y confía también pues el peso sobre tus hombros es tan grande como el de Ieshúa.
Me los entregó una Sabía, llena de luz, cuyos pies parecían no tocar el suelo y sus ropas se movían como si fueran sacudidas por suaves vientos. Era un ser tan hermoso que su belleza dañaba a los ojos.
Me dijo que descifrarías su secreto y comprenderías su significado. Te los entrego, hija mía.
-------
16 de diciembre de 2018
Convocatoria Reto del Jueves
Nos situaremos en alguno de los días y/o horas anteriores y/o posteriores, respectivamente, al "Momento J", al nacimiento de Jesús, incluso en este si es nuestro deseo.
Seremos un miembro de la comunidad, un peregrino en el camino, parte integrante de una de las familias que van hacia Belén; incluso podemos ser José o María por un día, o el mismísimo Jesús (la imaginación no tiene límites y todo es posible) o un Rey Mago así como cualquier otro personaje, referenciado o no históricamente, que pudiera tener fuentes fidedignas sobre el acontecimiento.
Como narradores podemos ser actores ajenos o no al hecho, pero sí seremos conscientes del rumor o de los sujetos principales y deberemos reflejarlos de algún modo para que nuestra historia sea considerada un manuscrito apócrífo, o un texto de autor real o un protoevangelio que alguien descubrirá en algún momento del futuro; o, al menos, un texto digno de ser tenido en cuenta. Os recuerdo que datos que ahora tomamos como normales salieron de textos así.
La originalidad no está en la historia en sí, sino en todo lo que la rodea. Todo está en nuestra capacidad de imaginar o de matizar.
Representación de la antigua Betania | De la red. Bien podría ser Belén, Nazaret o cualquier pueblecito de la época. |
Gracias de antemano por vuestra colaboración.
14 de diciembre de 2018
La llamada...
14 de noviembre de 2018
Alma en las migas...
11 de noviembre de 2018
Cierre de convocatoria
8 de noviembre de 2018
Mirando al cielo...
4 de noviembre de 2018
Convocatoria Reto del Jueves
Personalmente, me gusta observar el cielo de noche, disfrutar del brillo de la luna y hasta de las sombras que bailan ante ella, ocultándola. Alguna que otra vez, he visto cosas que no sé explicar y se han quedado ahí sin respuesta, aunque nunca me ha preocupado no obtenerla.
De eso va mi iniciativa de esta semana, viajeros de los jueves:
Os propongo que miremos el cielo, real o imaginariamente, y de entre las estrellas, por detrás de la luna o de una nube en pleno mediodía, estando solos o acompañados, aparece algo ante nuestros ojos, algo que podamos o no darle una explicación lógica pero que nos llame (o a nuestro protagonista) poderosamente la atención aún por simple que pueda ser, impactándonos y produciendo en nosotros una emoción especial: miedo, pánico, ternura, alegría, tristeza..., introspección...
A ras del cielo hay muchas cosas: aves, cometas multicolores, estrellas, rayos y centellas, un meteorito... o un OVNI (UFO), así que el resto es cuestión de imaginación y de inspiración para dar lugar a una historia de ciencia ficción, terror, misterio, amor... un cuento, letra de una canción o lo que se surja y en la forma que sea.
Solo me cabe agradeceros vuestra atención y espero ilusionada vuestras historias.
Feliz semana.
1 de noviembre de 2018
Ni el mismísimo demonio...
Él —o ello— no tiene alma pero sí todas las formas posibles del mal, todas las representaciones humanas de la malignidad que a una le cuesta creer y todas las que su divinidad le otorgan. Es una mala madre pariendo hijos monstruosos, un árbol de vileza con frutos muy amargos.
Ilustración de David Ho |
Atesoré toda mi fuerza. Con mi cuerpo tengo poco que hacer pero mi alma es demasiado válida para dejarla en sus manos. Mi piel no es un escudo. Todo lo contrario. No es más que una trampa... mortal. He aprendido a deshacerme de él, a autoinvocarme y desprenderme de ese peso para poder luchar de tú a tú. Siempre será más poderoso que yo pero tengo en mis manos algo que él jamás tendrá: Mi Alma. Y es mi mejor arma. Luchar contra alguien que se cree invencible es tener, ya, una batalla ganada.
Ilustración de David Ho |
Un día no quedaremos en tablas y con mi alma lacerada, si no que tendrá que arrodillarse, humildemente, ante mi luz. Permanecerá para los siglos de los siglos atrapado en una jaula, en el más puro ostracismo, pero para vencerlo hay que ir poco a poco, demonio o demonio, hasta que el último de ellos, llámese cómo se llame, quede postrado ante esta parte de mí raza pidiendo perdón.
Arte de David Ho |
29 de octubre de 2018
La verdad...
Llegaba al pueblo por el camino del cementerio. Sus pies estaban cansados y su cuerpo le pesaba como si no tuviera alma: "Las batallas más importantes en la vida son las que peleamos diariamente en el silencio de nuestra alma", se decía.
Tal vez la había perdido cuando fray Junípero falleció. Con él se habían acabado sus días de media vida. El nuevo prior se había ensañado con él, pagando todos los vicios y traumas de un hombre que, bajo los designios de Dios, horadaba su dignidad. Ya nos más palos. Ya no más lágrimas. Ya no sabía llorar y se había vestido de una coraza que le permitía sobrevivir en su propia soledad. Se acomodó en un rincón del pórtico de la iglesia y se escondió bajo su manto haraposo y sucio. Esperaba que no lloviera. No resistiría una noche más en esas condiciones. En su hatillo ni un corrusco de pan. El murmullo de la gente le servía de sonatina para intentar descansar pero no debía descuidarse ni un momento. Los vagabundos eran objeto de indiferencia pero también de mofa y violencia.
—Ten… No tengo dinero y no puedo sisar nada pero tú lo precisas más que yo —dijo entregándole una manzana. Nunca había visto unas manos como aquellas. Solo las suyas podían asemejarse. Le llamó la atención aquella mancha en la piel: una judía oscura que le cubría parte de la pala de la mano.
La dulzura de aquella voz femenina le alentó el corazón. Solo cuando sentía miedo le latía de aquella forma. No era habitual que le dieran algo sin poner mala cara o maldecirle la suerte. Sus ojos se encontraron con los de ella. Si pensó que aquella mirada era como la del mar que había leído en los libros del convento, ella vio en la de él, la inmensidad del cielo en plena tormenta.
—Gracias. Eres muy amable pero no deseo que tengas problemas por mí.
—Los tendré… sean por ti o por nada.
La joven se alejó siendo observada por el peregrino mientras el cielo estallaba en un sinfín de conjuros de truenos y rayos aunque no se atreviera aún a llorar.
Se comió la manzana. Dulce, crujiente, sana… Le supo al mejor de los manjares.
Al final la tarde empezaron a caer las primeras gotas. Eran frías y parecían piedras. Se volvió a proteger bajo su caparazón y aguardó a que la noche fuera benévola. Estaba tan cansado que no pudo conciliar el sueño más allá de intervalos de unas horas. Percibió el sonido de unos pasos en medio de la tormenta. Se mantuvo en silencio y quieto, con la daga empuñada en su mano, dispuesto a usarla si era preciso para defenderse pero entre los agujeros de su capa, atisbo las zapatillas de una mujer. Luego, el peso de una gruesa tela cubriéndole el cuerpo. Después, un calor agradable y olor a sopa de cebolla, unos rosigones de pan y unos trozos de pollo. Hacía años que no disponía de un menú así y en aquella cantidad.
Apenas había amanecido, la chica regresó a recoger el cuenco de la sopa.
—Gracias por la cena y la manta. Nadie se ha portado así conmigo desde hace muchos años. ¿Por qué lo haces tú?
—Porque algo dentro de mi interior dice que debo hacerlo. No puedo entretenerme ahora. Intentaré traerte algo después, cuando vaya al mercado. La manta puedes quedártela. No la echarán de menos.
—Gracias. Te llevaré en mi alma... cuando la encuentre. Mientras, en el corazón que tengo en alguna parte —dijo, llevándose la palma de la mano derecha sobre el pecho.
La mujer se fue como una gacela asustada hasta perderse de vista en la boca del callejón. También él se perdió sin dejar rastro. Al día siguiente, cuando el sol estaba en lo más alto y ella estaba entre los puestos del mercado, alguien la abordó. Era un fraile de mediana edad. Se dio a conocer de manera muy vaga y le hizo entrega de un morral. Sin más, desapareció entre la muchedumbre. Ella fue tras él pero no lo pudo alcanzar.
Se apartó a un lugar más tranquilo. Era una carta lacrada. Reconoció el sello del convento donde había nacido. Era una misiva larga y contundente por lo que acudió corriendo a casa para leerla con calma:
Para leer el manuscrito, picar en la imagen. |
Las manos le temblaban. Seguramente por eso se aferró al pequeño crucifijo de su madre mientras los ojos eran un manantial de lágrimas y su mirada se perdía en el horizonte que se dibujaba al otro lado de la ventana.
Había estado atendiendo a su hermano sin saberlo. Aquella mancha en la mano era la evidencia. Su corazón no le había engañado pero no sabía qué verdad le había estado diciendo.
Iría en su busca. Se había acabado eso de estar sola en el mundo. Ahora había una luz en su camino.
He elegido la frase de la película "Leyendas de Pasión".
Todos los textos y tapices, picando la imagen superior y los que ha creado para mi relato, en la inferior : |
25 de octubre de 2018
La Casa de la Colina...
Pero todo empieza a tomar otro matiz cuando aparece en el pueblo, una joven procedente de la capital: activa, dinámica, alegre y con unas enormes ganas de vivir a pesar de su minusvalía, consecuencia de una retinosis que le va reduciendo su campo de visión; que busca un lugar en el que reencontrarse consigo misma y hallar la calma que precisa para plasmar en un libro toda la inspiración que hay en su mundo interior. Para ello se instala en la llamada "casa de la colina": Una magnífica construcción que iba a ser el refugio del joven matrimonio, situada en lo alto de una suave colina que muere en la arena de la playa de Patara, y que Elma Lamark tiene para arrendar.
Podéis ver más en su blog "Neogeminis".
18 de octubre de 2018
Entre piedras..., la Vida
La besan.
La siembran.
como esperanza florida
con raíz fecundada,
a pétalos,
11 de octubre de 2018
Estío...
Ellie Fredricksen fotografiados por Irina Nedyalkova |
y juegos de verbos irregulares.
Carl y Ellie Fredricksen fotografiados por Irina Nedyalkova |
Ahí podéis disfrutar de otras perspectivas sobre el tema.
4 de octubre de 2018
Ritual...
Sobre una mesa cercana, una jofaina de barro con pétalos de flores fresas en su interior, junto a una jarra bellamente decorada y a varias toallas de suave tejido perfumado. Con todo ello, retrocedió sobre sus pasos. Lo colocó ordenadamente en el suelo.
Procedió, ritualmente, al volteó de los pétalos mientras susurraba unas palabras que parecían un rezo... o una bendición, al vaciado de la jarra.
Ella sonrió... y no pudo evitar el sonrojo cuando las manos y lengua del hombre ascendieron por sus piernas, cuando su boca contemplo el universo húmedo de la suya. Apenas un roce, apenas una caricia... Un entregar y un recibir... Un beso en el que se siente todo. Entre ellos, un beso era un pacto sagrado, un juramento atemporal, eterno, un paso hacia el paraíso, hacia el cielo: la Unción de sus almas.
Aunque el lavado de pies es común a muchas cultura, he elegido esta que tiene de especial este momento.
Bismillah es un término árabe que quiere decir “En el nombre de Allâh”. Según los preceptos, debería ser utilizado justo para iniciar un acto, incluso cotidiano, como comer, beber..., rezar, hablar, pensar... Es honrar a Dios con ese acto porque todo viene de Él. Además, puede dividirse en tres sílabas que explican mejor lo que realmente significa:
Bi: Que se entiende como “con ayuda de…”, “por intermedio de…”
Ism: Se refiere a la esencia misma de las cosas.
Allâh: Dios
(*) Hayati es una expresión cariñosa para alguien que significa mucho para uno, del tipo habibi, habiba, rohi.... Esta vendría a ser algo así como "mi vida".
1 de octubre de 2018
Una huida desesperada...
donde puedes ver las aportaciones de otros compañeros.
Proyecto Paraíso: Mar o Montaña.
Picando en la imagen puedes ver el texto configurado como un cuadernillo. Obra de Gin. |